El PSOE no reduce sus preguntas al Gobierno en el Congreso pese a los deseos de Bono para agilizar las sesiones

Actualizado: domingo, 22 junio 2008 14:20

El presidente del Congreso dictó una resolución que garantiza al PSOE que las preguntas que deje de hacer no se sumarán a la oposición MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Socialista del Congreso no está reduciendo significativamente las preguntas que semanalmente dirige al Gobierno en las sesiones de control, y todo ello pese a los deseos expresados públicamente por el presidente de la Cámara Baja, José Bono, que pidió esa reducción alegando que así se ganaría en "agilidad" y en "interés".

Desde la recomendación de Bono, el PSOE apenas ha reducido el número de cuestiones pues como máximo ha prescindido de dos de ellas. Así, para el próximo miércoles los socialistas han registrado siete de las nueve que venía dirigiendo, y todo ello pese a que ese día la sesión de control no empezará hasta las ocho de la tarde porque viene precedida de un debate sobre el Consejo Europeo.

PSOE NO RENUNCIA A SU DERECHO.

El portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, ya dejó claro que su grupo no renuncia al derecho de formular preguntas al Gobierno, aunque sea del mismo color político. También precisó que, si en alguna ocasión decide reducir su cupo, eso no debería redundar en más cuestiones para los grupos de la oposición.

En ese contexto, y oídos los portavoces de los distintos grupos parlamentarios, Bono acaba de publicar una Resolución de Presidencia, recogida por Europa Press, en la que actualiza las disposiciones anteriores sobre este tema y ofrece al PSOE esa garantía que reclamaba.

En concreto, la resolución dictamina que en cada sesión de control habrá 24 preguntas, de las que se reservan diez a cada uno de los grupos mayoritarios (PSOE y PP) y una para cada uno de los cuatro minoritarios (CiU, PNV, ERC-IU-ICV y Mixto). A renglón seguido se recalca que si un grupo presenta menos preguntas que las que le corresponden, "la diferencia no acrecerá el número de las atribuidas a los restantes grupos".

LAS "PREGUNTAS FLORERO".

Las preguntas que el grupo parlamentario que apoya al Gobierno dirige a su Ejecutivo han sido siempre objeto de debate en la Cámara Baja dado que, obviamente, no buscan controlar al Ejecutivo sino brindarle la oportunidad de presumir de su gestión. Por ello el PSOE, cuando estaba en la oposición, las definía como "las preguntas-florero" y exigía sin éxito al PP que las redujese.

Entre 1996 y 2004, los 'populares' preguntaban incluso a su presidente del Gobierno, entonces José María Aznar, lo que dejaba menos espacio a los grupos de la oposición. El PSOE acabó con esa costumbre cuando José Luis Rodríguez Zapatero llegó a la Moncloa pero no ha renunciado a plantear cuestiones de lucimiento para sus ministros.