POZUELO DE ALARCÓN (MADRID), 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal Socialista de Pozuelo de Alarcón condenó hoy con un comunicado los disturbios sucedidos en la localidad en la madrugada del sábado al domingo, que se saldaron con 20 detenidos --entre ellos siete menores-- y diez agentes heridos, y pidió al Ejecutivo local una política de juventud para un ocio sano de manera "urgente".
"Manifestamos nuestra más enérgica condena por los graves hechos de violencia que tuvieron lugar la madrugada del domingo. Las fiestas de nuestra ciudad deben ser un espacio para la celebración y convivencia pacífica y no pueden convertirse en excusa para la violencia gratuita de unos pocos alborotadores", afirmaron los socialistas.
La portavoz del Grupo, Eva Izquierdo, añadió asimismo que, "aunque afortunadamente se trató de altercados aislados, se puso de manifiesto la urgencia de abordar de una manera seria políticas de juventud orientadas hacia un ocio sano, tal y como reclama el PSOE".
"Estas políticas deben servir también para prevenir comportamientos violentos como los de anoche. La imagen de miles de jóvenes haciendo botellón en nuestra ciudad debe hacernos reflexionar sobre la importancia de atender las necesidades de ocio de nuestros vecinos más jóvenes", añadió la edil.
Así, el PSOE solicitará "la creación de una comisión municipal que analice la situación de forma rigurosa y elabore un Plan Integral de juventud para Pozuelo", y reclamará al Gobierno de Gonzalo Aguado (PP) que "se replantee la actual configuración de las fiestas patronales, que desde hace algunos años resultan cada vez más deslucidas y no satisfacen a los vecinos".
"Los ciudadanos de Pozuelo merecemos unas fiestas que vuelvan a ser el lugar de encuentro que tradicionalmente han sido", añadió Izquierdo, deseando, por último, una pronta recuperación a los heridos, "especialmente a los miembros de las fuerzas de seguridad que fueron agredidos a quienes el PSOE muestra todo su apoyo y agradecimiento".
Asimismo, la concejala trasladó la solidaridad de sus compañeros de filas a "los vecinos que han sufrido desperfectos en sus viviendas y vehículos". Los causantes de los disturbios, que llegaron incluso a intentar entrar en la comisaría del municipio, han pasado ya a disposición judicial por desórdenes públicos.
