PSOE prevé cerrar este mes las enmiendas al Estatuto extremeño a la espera de una decisión sobre el castellano-manchego

Actualizado: domingo, 7 marzo 2010 13:30

MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

El PSOE prevé que el plazo para la presentación de enmiendas parciales al nuevo Estatuto de Autonomía de Extremadura se cierre en las próximas semanas y que antes de que acabe marzo se constituya la ponencia para discutirlas en el seno de la Comisión Constitucional, precisamente el órgano que tiene pendiente desde hace un año elaborar un informe sobre el Estatuto de Castilla-La Mancha, bloqueado por la incapacidad de PSOE y PP de llegar a un acuerdo sobre el futuro del trasvase Tajo-Segura y la reserva hídrica.

El presidente del Congreso de los Diputados, el socialista José Bono, ya ha señalado que los proyectos de reformas estatutarias se tramitan según su orden de llegada, pero que "no hay ningún obstáculo reglamentario" para que el extremeño adelante al castellano-manchego si los dos grandes partidos mantienen sus distancias sobre el texto procedente de la comunidad que preside José María Barreda.

Fuentes socialistas informaron a Europa Press de que la intención del PSOE es que la nueva norma extremeña pueda estar en vigor el próximo verano, para lo que es necesario que su tramitación culmine el próximo mes en el Congreso y que en el Senado se complete todo antes de que en junio concluya el presente periodo de sesiones.

El Estatuto de Extremadura, cuya modificación llegó a la Cámara Baja con el respaldo de PSOE y PP a finales de septiembre de 2009, fue tomado en consideración dos meses después en sesión plenaria. Desde mediados del pasado mes de noviembre se ha ido prorrogando el plazo para que los grupos presenten sus enmiendas parciales.

ENMIENDAS CONJUNTAS CON EL PP

En este periodo, el PSOE ha estado elaborando sus enmiendas parciales, que ya tiene casi ultimadas. Los socialistas, que no prevén registrar un amplio paquete de enmiendas, las han redactado teniendo en cuenta las alegaciones de los distintos ministerios y su intención es registrarlas conjuntamente con el PP.

Dado que el texto salió del Parlamento extremeño con el apoyo de PSOE y PP, los socialistas no creen que haya problemas para que los dos grandes partidos suscriban las mismas enmiendas, aunque aún tienen pendiente una cita con los representantes del partido de Mariano Rajoy en la Cámara Baja.

Este amplio acuerdo permitirá que la tramitación en el Congreso se realice con rapidez y, si es posible que quede liquidada tras una única reunión de la ponencia y otra posterior de la Comisión Constitucional del Congreso. El trámite en el Senado se prevé igualmente ágil, con lo que la reforma del Estatuto de Extremadura podría quedar definitivamente aprobada en mayo o en junio y estar ya en vigor en verano de este año.

CASTILLA-LA MANCHA, EN DIQUE SECO

Ahora bien, los dos partidos mayoritarios deben tomatr ya una decisión sobre el Estatuto de Castilla-La Mancha, que se registró en el Congreso hace ya tres años y que lleva 'congelado' doce meses en la misma Comisión Constitucional que debe examinar el texto extremeño.

El PSOE y el PP empezaron discutiendo sobre la caducidad del trasvase Tajo-Segura, que el texto original preveía para 2015, si bien los socialistas castellano-manchegos aceptaron subordinar esa pretensión a cambio de una reserva hídrica para su comunidad de 6.000 hectómetros cúbicos, una cifra que el PP de la Comunidad Valenciana y de Murcia consideran inasumible.

El pasado mes de diciembre los dos partidos mayoritarios, que ya habían presentado sus enmiendas por separado diez meses antes, se comprometieron a reactivar la reforma en febrero e incluso el PSOE habló de sacarlo adelante con el resto de grupos sin contar con el PP, su socio original en las Cortes de Castilla-La Mancha.

Pasó febrero y la ponencia no se ha vuelto a reunir, por lo que UPyD ya ha pedido que la reforma sea retirada. Hasta ahora la reforma del Estatuto canario ha sido la única de las nueve tomadas en consideración por el Congreso en las dos últimas legislaturas que no ha logrado ser aprobada por falta de consenso.

Si finalmente las conversaciones entre PSOE y PP arrojan algún resultado, la tramitación de los estatutos castellano-manchego y extremeño podrían realizarse en paralelo, con la consiguiente carga de trabajo para los representantes de los partidos minoritarios en la Comisión Constitucional, que habrían de llevar dos reformas a la vez.