Cree que Rajoy "crea rencor" y llama a pedir el voto de "todos" para "ampliar el espacio electoral" con "serenidad y firmeza" frente al PP
MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El PSOE subraya que el elemento "más importante" de la campaña del 27-M es la "movilización" y para ello, este partido con "identidad moderada y progresista, que mantiene un espacio electoral amplio y abierto" llama a "ampliarlo" pidiendo el "voto a todos los ciudadanos".
En la 'Guía de Campaña', que recoge Europa Press, los socialistas reconocen como "indudable" que los comicios son "de ámbito nacional", auguran que el PP estimulará "sentimientos de agravio generalizado" y sostienen que el líder del PP, Mariano Rajoy, "habita en la España del pasado y no crea confianza ni ilusión, sino confusión y rencor".
El partido de José Luis Rodríguez Zapatero --que no hace referencia alguna a la política antiterrorista en el documento, salvo para criticar a los 'populares'-- cree que el PP, "cada vez más escorado a la derecha extrema, se esfuerza por mantener emocionalmente movilizado a su electorado tradicional, pero se aleja de la moderación y se cierra a sí mismo la posibilidad de aumentar su espacio electoral".
Con unos análisis optimistas de los sondeos, indica que su objetivo es "ganar" los comicios, lo que "no significa ganar en todas las comunidades y municipios, aunque sí es posible avanzar en la mayoría de ellos".
ESTIMULAR PARTICIPACIÓN
El "doble criterio" objetivo que usará para valorar su resultado electoral a nivel nacional será el "número total de votos en las elecciones municipales" --en 2003 logró el 34,8 por ciento de votos y el PP, el 34,3-- y "número de gobiernos municipales y autonómicos".
Para lograr este objetivo de ser los más votados en las municipales y aumentar el número de alcaldes y de gobiernos autonómicos, la "estrategia" pasa por la de "un partido con vocación mayoritaria", lo que significa que quienes han votado socialista vuelvan a hacerlo, estimular "la máxima participación en las urnas" y "ampliar el espacio electoral" pidiendo el voto "a todos los ciudadanos".
En ese punto, recalcan que son un partido "socialista y de izquierda", pero que por ello defienden ante todo "el interés público" y que, por ello, los candidatos deberán empeñarse en trasmitir que están en condiciones de defender "los intereses de la mayoría". "Pediremos el voto desde nuestra propia identidad política, pero no para ella, sino para nuestro compromiso con nuestras ciudades, nuestros pueblos y comunidades", dicen.
El PSOE recuerda que en las generales de 2004 lograron tres millones de votos más (11 frente a 8) que en las municipales de 2003. Aseguran que esa "diferencia" no corresponde "a ningún otro partido", sino a ciudadanos "que han votado socialista" y se han abstenido. Por ello, frente a la "estrategia" del PP de "favorecer" la abstención, el PSOE deberá "estimular la participación".
Esta se consigue con el "contacto directo con los ciudadanos", estando en los "entornos sociales inmediatos": los "centros de trabajo y de ocio, las familias y el entramado social". "Estas son sobre todo las elecciones de la movilización y de la participación y esta consideración debe reflejarse plenamente en nuestro modelo de campaña", dicen.
ZAPATERO Y LÍDERES NACIONALES.
El PSOE cree "indudable" que se está ante unas elecciones de "ámbito nacional y ante una campaña nacional", si bien recalcan que, aunque habrá una "presencia importante de los líderes nacionales del partido y del Gobierno", incluyendo a Zapatero, los "auténticos protagonistas" son los candidatos autonómicos y locales y que los socialistas no les "suplantarán" como en el PP, que las ve como "primarias de las generales". "Es decir, que a quien se vota es a Rajoy", resumen.
Creen que la campaña se desarrollarán en el debate de ámbito nacional sobre las cuestiones de carácter general y también, en el "específico" de cada municipio y comunidad, este último protagonizado por los candidatos.
El PSOE destaca la "diferencia esencial" frente a 2003 de que el partido ahora está en el Gobierno de España y que ello será una "referencia obligada" del debate electoral, por lo que deberán estar "en condiciones" de explicar y defender no sólo la política "general" del Ejecutivo, sino la que ha desarrollado "en cada territorio".
"El PP estimulará sentimientos de agravio generalizado; frente a esa demagogia, demostraremos con datos y con hechos que el Gobierno ha desarrollado una política razonable de equilibrio territorial, de solidaridad y de progreso para toda España", apela el PSOE.
Llama a afrontar y ganar "todos juntos" la campaña en su "doble nivel, nacional y local/autonómico" y aseguran que el PP hará "lo mismo" que desde que perdió el 14 de marzo, esto es, la "estrategia de la crispación y de la mentira", que "crecerá en intensidad" de aquí al 27 de mayo. "Frente a ella, mantendremos la serenidad y la firmeza".
FUTURO, INTERÉS PÚBLICO, PROXIMIDAD Y SENSIBILIDAD.
El PSOE destaca que actitud positiva ante el "futuro", compromiso con el "interés público", proximidad a los problemas de los ciudadanos y "sensibilidad social" son los "rasgos" que "deben identificar a todos los candidatos socialistas" e impregnar todos sus mensajes.
Con los citados "rasgos", intentarán trasladar que "hay que participa" en las elecciones; que estarán "del lado de los ciudadanos"; que defienden "que el progreso económico beneficie a todos y no sólo a unos pocos"; que quieren "mejorar el presente y defender el futuro", frente al "pasado" del PP; que creen "en el Estado de las Autonomías" sin "nostalgia del centralismo", que practican la "cooperación institucional" y que defienden "una convivencia libre y segura". Frente a ello, tildan la política "de la derecha" como "socialmente desintegradota".
El PSOE identifica como cuestiones que "más preocupan" a los ciudadanos españoles la seguridad ciudadana e inmigración; la vivienda y el empleo para los jóvenes y las pensiones y dependencia para los mayores; la sanidad y la educación; la movilidad y el tráfico; el medio ambiente, las infraestructuras y el urbanismo. El PSOE pide a los suyos ser "comprensibles" y resaltan que estas cuestiones deben ser "el núcleo central" del mensaje en estos comicios.
Lo harán con "un discurso positivo, de objetivos y propuestas", pero también "crítico respecto a las posiciones del PP y a su gestión" en donde gobiernan. Con estas premisas, proclaman, entre las "ideas básicas de campaña", que las razones por las que se decidió votar "cambio" en 2004 siguen "vigentes" y son las mismas para pedir ahora el voto y que el PP es "reaccionario, extremista, anticuado" y enfrenta "a los españoles entre sí".
BUNKERIZACIÓN Y MENTIRA DEL 11-M.
Previamente, el PSOE arremete duramente contra el PP. "Dirigido por las mismas personas que fueron responsables de la política y de los hechos que condujeron a su derrota electoral, el PP no ha sido capaz de digerir el resultado del 14-M ni de articular una nueva política adecuada a las actuales circunstancias de España", afirman.
Así, creen que los 'populares', han puesto en marcha una "estrategia de crispación política" caracterizada por "la confrontación institucional"; la recuperación de un discurso "cada vez más próximo a la extrema derecha"; la "bunkerización", dado que "no hay en España" ningún partido "que comparta la política del PP".
Otras características son la "obstaculización de todas las reformas" del Ejecutivo; la "negativa a colaborar en la lucha contra el terrorismo" y su uso "como instrumento de agitación social y de lucha partidista"; su "nostalgia centralista" y la utilización "sistemática de la mentira, como se vuelve a comprobar en el juicio del 11-M". "Los dirigentes del PP mantienen un discurso aferrado al pasado y completamente desligado de los problemas de los ciudadanos", concluyen.
