PSOE quiere aprobar en un mes el pacto para debatir y votar en público las actividades extraparlamentarias de diputados

Actualizado: jueves, 24 septiembre 2009 16:00

Alonso confía en que los dictámenes de incompatibilidades también dejen de ser secretos, como solicitaron los grupos en abril

MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -

El PSOE quiere que el Congreso apruebe en el plazo de un mes una reforma del Reglamento de la Cámara para que el debate y la votación en Pleno de los dictámenes relativos a las actividades extraparlamentarias de los diputados dejen de ser secretos. El pasado mes de abril todos los grupos de la Cámara llegaron un acuerdo para impulsar esta modificación y ahora los socialistas van a hablar con el resto del arco parlamentario para conseguir que sea realidad en semanas y que el próximo dictamen de compatibilidades se discuta y apruebe ya con luz y taquígrafos.

Así lo anunció hoy en rueda de prensa el portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Alonso, quien también se mostró a favor de hacer públicos los dictámenes en los que se detallan las tareas que los parlamentarios realizan al margen del Congreso.

El dirigente socialista recalcó que el hecho de que estos asuntos puedan debatirse y votarse en abierto supondrá un "salto cualitativo desde el punto de vista de la transparencia" y permitirá a los ciudadanos "controlar" el ejercicio de las actividades políticas.

En este contexto explicó que la reforma no plantea ninguna complejidad técnica y se mostró convencido de que contará con "la práctica unanimidad" de todos los grupos. "Creemos que no habrá el más mínimo problema para hacerlo y para hacerlo muy rápido", agregó el dirigente socialista.

De hecho, el acuerdo para acometer estos cambios ya se alcanzó el pasado mes de abril, cuando la Comisión del Estatuto del Diputado suscribió por unanimidad un pacto para hacer públicos los dictámenes que recogen las actividades extraparlamentarias de los diputados, así como los debates y votaciones que sobre ellos se produzcan en sesión plenaria.

Concretamente, el órgano que autoriza las actividades de diputados ajenas a la Cámara se pronunció a favor de que la votación del dictamen de incompatibilidades en el Pleno "tenga carácter público". Es decir, todos los grupos comparten que esa votación deje de ser secreta, aunque no se pronuncian sobre si se debería desvelar el voto de cada parlamentario o bastaría con el resultado global de la votación, algo que ni siquiera ahora se conoce.

En aquel momento, el presidente de la Comisión del Estatuto del Diputado, el socialista Francesc Vallès, ya precisó que los debates en el seno de la comisión, al tratarse de declaraciones de actividades aún no avaladas por la Cámara, seguirán siendo a puerta cerrada. De lo que se trata es de que, una vez sea aprobado por la comisión, el dictamen pueda distribuirse entre todos los parlamentarios (actualmente se envía sólo a los portavoces de cada grupo) para que sepan lo que van a votar en el Pleno.

Alonso detallo hoy que propondrán una reforma del artículo 63.2 del Reglamento del Congreso, que establece que las sesiones del Pleno serán secretas cuando se debatan "propuestas, dictámenes, informes o conclusiones elaboradas en el seno de la Comisión del Estatuto de los Diputados", aunque agregó que el objetivo es que los ciudadanos tengan pleno conocimiento de las actividades que realizan los diputados al margen del Congreso.

DECISIÓN DE LA MESA DEL CONGRESO

Tras sellar el acuerdo de junio, Vallès mostró su confianza en que la Mesa del Congreso haga una interpretación menos restrictiva de la que hace hasta ahora y facilite el acceso al dictamen que finalmente apruebe la Cámara. En este momento, el órgano de gobierno del Congreso tiene que autorizar expresamente la consulta de esos datos, que sólo pueden ser examinados en presencia de un funcionario y ni siquiera se pueden fotocopiar.

La fórmula para hacer efectiva la publicidad de los dictámenes que contienen las actividades que los diputados realizan fuera de la Cámara la habrá de determinar Mesa del Congreso, a la que la Comisión del Estatuto del Diputado solicitó que tome en consideración una eventual reforma de las normas que rigen en materia de registro de intereses, con el fin de "facilitar la publicidad por los medios que estime más oportunos de los dictámenes y acuerdos relacionados con el régimen de incompatibilidades".

La idea inicial del PSOE es que las actividades que los diputados realizan al margen del Parlamento puedan estar a disposición de todos los ciudadanos en la página web de la Cámara.

El debate sobre la conveniencia de dar mayor transparencia a las actividades de la comisión y de los diputados surgió el mes pasado, coincidiendo con la votación del dictamen secreto por el que se concedió la compatibilidad a varios diputados que desarrollan actividades privadas, entre ellas los ex ministros Ángel Acebes y José María Michavila (este último renunció a su acta de diputado este verano); el ex presidente de Endesa e Ibercaja, Manuel Pizarro, y el ex director general de RTVE Fernando López Amor.

Aquel dictamen, el primero que se había filtrado a un medio de comunicación, salió adelante sin problemas, pero, en contra de lo habitual, un centenar de diputados optó por no respaldarlo expresando así su disconformidad con la interpretación que actualmente se hace de la ley que, en algunos casos, se considera muy permisiva.

REFORMA DE LAS INCOMPATIBILIDADES

El pasado mes de junio, la Comisión del Estatuto del Diputado también acordó estudiar la posibilidad de avanzar hacia una reforma del actual régimen de incompatibilidades parlamentarias que debería afectar también a las previstas para los senadores. Los presidentes del Congreso, José Bono, y del Senado, Javier Rojo, ya han mostrado su disposición a impulsar la publicidad de los dictámenes y a modificar el régimen de compatibilidades vigente.

El objetivo final es que, si se logran consensos, bien la comisión del Estatuto o, en su caso, un órgano de carácter mixto con miembros de la dos Cámaras, elaboren una serie de recomendaciones en torno al régimen de incompatibilidades para remitirlas a la subcomisión de la Comisión Constitucional del Congreso que, en este momento, analiza una posible reforma de la Ley Electoral.

A este respecto, Alonso recordó hoy que el PSOE es partidario de "hacer una interpretación estricta" puesto que considera que "la función parlamentaria es capital en la vida política y social" y que los diputados "básicamente se tienen que dedicar a aquello para lo que son elegidos". "Vamos a ser muy rigurosos al respecto", garantizó.