El PSOE reiterará mañana a la vicepresidenta que los acuerdos sobre corrupción no se pueden limitar a dos proyectos

Soraya Rodríguez
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 18 marzo 2014 14:40

MADRID, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

La portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha confirmado que el PSOE acudirá este miércoles a la reunión que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha convocado a los grupos parlamentarios para hablar sobre corrupción para reiterarle que los acuerdos en esta materia no se pueden circunscribir únicamente a los dos últimos proyectos de ley sobre regeneración democrática aprobados por el Consejo de Ministros.

Así lo ha señalado en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, donde ha avanzado que aprovechará ese encuentro para dejar claro a la 'número dos' del Gobierno que un futuro pacto contra la corrupción no puede limitarse a discutir sobre dos proyectos de ley que ya están en el Congreso, como así se lo expuso en la carta que recientemente le hizo llegar a Sáenz de Santamaría.

Según ha defendido, para hablar de acuerdo es necesario no sólo hablar de esas dos iniciativas gubernamentales --el proyecto de Ley Orgánica de control de la actividad económica-financiera de los partidos políticos y el proyecto de Ley reguladora del ejercicio del alto cargo de la Administración General del Estado--, sino de otras cuestiones.

Entre éstas ha citado la reforma del Código Penal que está tramitándose ya en la Cámara Baja y que, según ha criticado, carece de medidas relativas la corrupción, de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, de la Ley del Indulto o de la Ley del Tribunal de Cuentas.

SUBCOMISIÓN PARLAMENTARIA

Asimismo, la portavoz socialista ha apuntado que aprovechará la reunión de este miércoles para denunciar que la Ley Orgánica de control de la actividad financiera de los partidos no se haya planteado por primera vez como proposición de ley, es decir, por acuerdo de todos los grupos parlamentarios.

Pero también para insistir en la necesidad de crear una subcomisión parlamentaria donde todas las fuerzas políticas, junto con expertos de la materia, pongan encima de la mesa posibles soluciones a las prácticas corruptas.