Pujol (CiU) afirma que el reagrupamiento familiar se aplica "sin rigor"

Actualizado: miércoles, 11 junio 2008 16:01

Maragall se presenta por sorpresa en un coloquio de su amigo Rubert de Ventós y Pujol

BARCELONA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol (CiU) defendió hoy el reagrupamiento familiar de inmigrantes, pero afirmó que en España y Europa "se aplica sin rigor" y que debe limitarse a la familia nuclear del inmigrado.

Para él, el reagrupamiento no puede extenderse a "una multitud". "No sabemos cuántos hijos vienen, si son hijos o no, y cuántas mujeres vienen". Concluyó que hay una "gran laxitud", y la atribuyó en parte a los ayuntamientos a la hora del empadronamiento.

Pujol afirmó que Europa no tiene capacidad de reacción y es "muy blanda", y advirtió de que "el blando, cuando reacciona, a veces reacciona mal".

También defendió que no se puede acceder a la ciudadanía si no se conoce "la lengua de uso", y constató que muchos países aceptan ya esta opinión.

Lo dijo durante un desayuno-coloquio del Centro de Estudios que lleva su nombre, con periodistas y con el filósofo Xavier Rubert de Ventós como invitado, para hablar de los hechos de mayo de 1968 y de Europa.

Además, se presentó el número 6 de 'VIA', la revista del Centro, dedicado también a mayo del 68 con opiniones de André Glucksmann, su hijo Raphaël, Luc Ferry y Salvador Giner, entre otros.

PROGRESO EN ORIGEN.

Pujol apostó una vez más por el progreso de Marruecos, y puso como ejemplo su confianza en el puerto de Tánger, cuyo desarrollo --dijo-- no debe asustar a España en general ni al puerto de Algeciras en particular, porque hay que tender más bien a pensar en la colaboración entre ambas infraestructuras.

De hecho, consideró que la fortaleza de ese puerto marroquí es uno de los factores que puede evitar demasiados inmigrantes del país hacia España --"tampoco necesitamos tanta inmigración", apuntó--.

Xavier Rubert de Ventós criticó la "hipocresía" de los países que se aprovechan de la mano de obra inmigrante sin una legislación suficientemente "explícita" para ellos.

LEGISLACIONES EXPLÍCITAS.

Por ello, pidió a Europa "no ser berlusconiano ni esconder la cabeza bajo el ala como los otros". Constató además que la derecha "tiene a la formulación explícita, descarnada", en la legislación sobre inmigrantes, mientras que hay quienes "dejan que los sistemas vayan tirando adelante tácitamente".

Según Rubert de Ventós, una legislación "explícita" para este sector implica "hacer explícito su nivel de tolerancia". Y aprovechó para hacer una analogía: los países ricos asimilan en silencio el "trabajo negro" de la inmigración como la Europa medieval aceptaba implícitamente el "dinero negro".

Afirmó también que buena parte de quienes emigran a la UE buscan "protección", mientras que el emigrante en Norteamérica busca "proyección", algo con lo que Pujol se mostró de acuerdo.

ASISTENTE SORPRESA.

El ex presidente catalán Pasqual Maragall se presentó por sorpresa una vez empezado el acto. Fue especialmente bienvenido por su gran amigo Rubert de Ventós y Pujol, que se levantó especialmente para saludarle.

Maragall intervino brevemente en algunas ocasiones, pero no entró en el debate sobre la inmigración, sino que repasó anécdotas de la época de mayo del 68, sobre todo por el impacto que tuvo en él y en su entorno de entonces, en el que se ya estaba Rubert de Ventós como amigo suyo.

Incluso recordó la relación de la familia Maragall con Pujol en esos años del franquismo, y la lucha de ambos contra la dictadura. Pero, en vez de entrar a fondo en temas como la inmigración, se limitó a decir desde el principio que acudía fundamentalmente para escuchar.