Cree que podría llegar a ser el inicio del fin de Nissan en Cataluña
BARCELONA, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de CiU en el Parlamento catalán, Oriol Pujol, pidió hoy al presidente de la Generalitat, José Montilla, que "deje de esconderse" y actúe ante la crisis tras el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) anunciado hoy por Nissan.
En un comunicado, Pujol criticó la "ineficaz e inexistente" política industrial del Ejecutivo, y reclamó a Montilla que "reaccione de una vez" y se ponga "al frente" del Govern para afrontar la crisis económica que sufre Cataluña, y, especialmente, la del sector de la automoción.
Recordó que Montilla fue antes ministro de Industria, y lamentó que antes Cataluña tuviera un presidente que "viajaba a cualquier parte del mundo para defender los puestos de trabajo" y ahora, en cambio, el presidente "se esconde bajo la mesa".
Según él, el Govern no ha sabido anticiparse al cambio de ciclo económico, pero es "más preocupante" aún que sea "incapaz de reaccionar y encontrar medidas que ayuden a los trabajadores catalanas".
El portavoz parlamentario de CiU remarcó que el ERE de Nissan es "muy preocupante" porque "podría llegar a ser el inicio del fin de Nissan en Cataluña. "No hay modelo, no se invierte, las nuevas inversiones se hacen en Tánger y el Govern no reacciona", reprochó Pujol, que culpó a Gobierno y Generalitat por la "descoordinación total" que hubo en su momento al permitir que Nissan adjudicara la producción de un nuevo modelo a una planta en construcción en Tánger (Marruecos) en lugar de a Barcelona.
Lamentó que día a día se demuestra que el Govern "no está preparado para gestionar periodos de crisis", y recordó que hace dos semanas, el Ejecutivo aseguraba que en 2008 habría menos ERE que en 2007.
Ante esta situación, apuntó que CiU presentó una propuesta de resolución en el Debate de Política General que pedía impulsar la mesa sectorial de la automoción, y fue rechazada por los socios del Govern.
Además, recomendó al Partido Socialista que "aprenda" de las decisiones políticas que Francia toma para proteger la industria de automoción francesa, con repercusiones negativas en la industria española y catalana.
