Quiroga cree que los obispos de Guipúzcoa han "confundido" su "vocación" porque han hecho política "de la mano" del PNV

Actualizado: miércoles, 16 diciembre 2009 12:36

MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, lamentó hoy que los obispos de Guipúzcoa hayan "confundido" lo que es "su vocación", tras su rechazo ayer al nombramiento de José Ignacio Munilla como obispo de San Sebastián, ya que, a su juicio, se han dedicado ha hacer política "de la mano" del Partido Nacionalista Vasco (PNV).

Para ella, el documento escrito por el clero guipuzcoano en repulsa al nuevo nombramiento contiene "auténticas barbaridades" y aseguró, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, que le produce una "profunda y tremenda tristeza" porque Munilla es un sacerdote que "dice lo que dice la Iglesia" y que "no se inventa nada".

Asimismo, calificó de "curioso" el hecho de que no hayan remitido la carta al Vaticano y sí lo hayan hecho a los medios de comunicación, al tiempo que subrayó que la designación de Munilla pone de manifiesto "algo que todos, y también la Iglesia, sabíamos que estaba mal" ya que estaba siendo "muy difícil" ser "católico" en el País Vasco.

"El PNV ha querido como siempre tutelar absolutamente todo, incluso hasta la Iglesia vasca", denunció para destacar que la "mayoría de los feligreses" están "expectantes y con ilusión" ante el nuevo nombramiento porque es una "persona joven que en el País Vasco y en Guipúzcoa hacía tiempo que no se veía".

ZAPATERO ES EL "FUEGO AMIGO"

Por último, preguntada por el pacto del Partido Popular y el Partido Socialista en Euskadi, la presidenta del Parlamento vasco afirmó que "se estaba preparado" para las "críticas" del PNV pero no para "el fuego amigo" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

"Es el fuego amigo porque en el País Vasco el PP es el socio preferente del PSOE y en Madrid el socio preferente de Zapatero es el PNV", remarcó. Dicho esto, lamentó las dificultades que tiene el lehendakari Patxi López para poder "conciliar" las "políticas activas de empleo" en un momento en el que el Gobierno central "le da la posibilidad de veto al PNV".