Rajoy cree que tanto Gallardón como otros barones del PP podrían ser un buen 'número dos' y recomienda prudencia

Actualizado: miércoles, 30 mayo 2007 22:36


MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP, Mariano Rajoy, dijo hoy que tanto el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, como otros destacados dirigentes del PP podrían ser un buen 'número dos' en las listas del partido para las próximas elecciones generales y se mostró "muy orgulloso y contento" de que personas como Rita Barberá, Francisco Camps o Jaume Matas se hayan ofrecido a ayudarle. No obstante, lanzó un mensaje a través de refranes en el que pidió "un poquito de prudencia" y defendió que "en el medio está la virtud".

Se da la circunstancia de que ayer Gallardón manifestó su "ilusión" por acompañar a Rajoy en las próximas elecciones generales y manifestó su intención de ayudar todo lo posible para que se convierta en el próximo presidente del Gobierno. "Seré el alcalde de todos los madrileños y si tú quieres, querido presidente, trabajaré para que seas el presidente del Gobierno", dijo Gallardón.

En declaraciones a Antena 3 recogidas por Europa Press, Rajoy reconoció que le "reconforta y satisface" el ofrecimiento del alcalde de Madrid pero recordó que "lo bueno" del PP es que tiene "muchas personas y muy brillantes", por lo que insistió en que "podría ser un buen número dos pero también muchos otros". "Tenemos un material humano de primera, estamos muy unidos y una firme voluntad de ganar", subrayó.

En este sentido, explicó que a él se le puede ayudar "de diversas maneras" y "todo el mundo quiere ayudar de la manera más intensa que puede, que es ir en la lista", lo que, según defendió, demuestra que todos los dirigentes del PP han "valorado" su trabajo como presidente del partido y "permite decir a los españoles" que se presenta a las elecciones generales como un partido "unido" que puede dar "seguridad, estabilidad y certidumbre".

"CUANDO SE CONVOQUEN ELECCIONES YA SE LO DIRÉ"

Así, pese a los numerosos elogios dirigidos a Gallardón y ante las múltiples preguntas recibidas sobre este tema, recurrió a las metáforas para dejar clara su postura. "Cuando se convoquen las elecciones ya se lo diré, que es cuando se toman las decisiones. Si un niño tiene siete años le va a preguntar ahora a su padre qué va a estudiar, pues déjeme esperar a que tenga la posibilidad de elegir", afirmó.

"Hay muchos alumnos aventajados en España y a los ocho o nueve años aún no deciden la carrera que quieren estudiar --continuó--. Incluso hay gente que empieza a estudiar la carrera y es gente muy inteligente, muy capaz y luego se da cuenta de que lo que hay que hacer es estudiar otra". "Todo a su debido tiempo, en la vida un poquito de prudencia y siempre precavido vale por dos, en el medio está la virtud", insistió recurriendo a los refranes.

Rajoy fue además cuestionado sobre el papel de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, dentro del partido, respecto a lo que recordó que como presidenta de una comunidad autónoma no puede ser candidata al Congreso, "aunque sí puede ser senadora". Sin embargo, insistió en la idea de la importancia del apoyo de muchos dirigentes como la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, o los presidentes de Valencia o Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, respectivamente.

El presidente del PP rechazó además la campaña electoral de candidato del PSOE a la Alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián, y reconoció que se quedó "estupefacto" con las acusaciones con las que, según criticó, "demostró un pésimo estilo". Además, recordó que Sebastián fue el candidato impuesto por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y que esta campaña se desarrolló "con el apoyo" del Palacio de la Moncloa.

PP: "OPCIÓN SERIA Y FIABLE"

En este contexto, defendió que el PP ha sido el "ganador" de las elecciones municipales y autonómicas, lo que le "anima a trabajar" para "convencer a los españoles" de que son "una buena opción" para España. Así, explicó que los próximos meses se dedicará a mostrar que los 'populares' son "una opción seria y fiable" para garantizar "seguridad, certidumbre y confianza". "Voy a hacer todo lo que pueda para ser el próximo presidente de España", reiteró.

Así, insistiendo en la idea de llegar a jefe del Ejecutivo, explicó que presentará un proyecto político para España en el que los problemas no son la memoria histórica "ni cuántas naciones somos", sino que nos encontramos en "un mundo cada vez más abierto y global". Así, repasó las necesidades a las que se enfrenta la administración, la educación o la economía y aseveró que su objetivo "capital" es preparar a España para "competir en un mundo competitivo y capital".

El líder del principal partido de la oposición coincidió con Gallardón en calificar a Zapatero como un "paréntesis" y criticó que el presidente "se ha equivocado en las prioridades de España". "El mundo es muy complicado, cambia a toda velocidad y nos hemos dedicado a debatir de Franco, la República, la historia, hemos tenido líos con la Iglesia, el Vaticano, con todo el mundo", lamentó para ofrecer a continuación "un país normal en el que se pueda confiar y con voluntad de unir a la gente".