9-M.- Rajoy dice que el cambio es "una necesidad nacional" porque a Zapatero "se le ha subido La Moncloa a la cabeza"

Actualizado: domingo, 24 febrero 2008 16:14

Asegura que se ha acabado "el mito del talante" porque el jefe del Ejecutivo "no ha dialogado" con el PP y al PSOE, lo ha "traicionado"

BURGOS, 24 Feb. (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Marisa Piqueras) -

El candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró hoy que el cambio en las próximas elecciones generales del 9 de marzo es una "necesidad nacional" porque a José Luis Rodríguez Zapatero "se le ha subido La Moncloa a la cabeza" y "se ha olvidado de los problemas de la gente". Es más, señaló que el "mito del talante ha saltado por los aires" porque en esta legislatura el diálogo ha sido "con ETA, con ERC y con IU". "No ha dialogado con la inmensa mayoría de los españoles, que representa al PP y a su propio partido, al que ha traicionado".

Así lo afirmó ante unas 4.000 personas en en el Polideportivo El Plantío de Burgos, al que llegó acompañado de su 'numero dos' por la lista de Madrid, Manuel Pizarro, el alcalde de Burgos y cabeza de lista por esta provincia, Juan Carlos Aparicio, y el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. "España merece otro presidente" o "Se nota, se siente, Mariano Presidente", fueron algunas de las consignas que se corearon en el mitin.

Rajoy abrió su discurso asegurando que en esta legislatura al PP le "han arreado" pero que su formación ha "devuelto unas cuentas, como era justo y natural". "Siguen arreándonos y seguirán haciéndolo pero han olvidado una cosa, que el PP es un gran partido y tiene capacidad y aguante para pasarlo en las perores circunstancias posibles", avisó.

Y este contexto volvió a sacar la conversación fuera de micrófono que mantuvieron el presidente del Gobierno y el periodista Iñaki Gabilondo en la que, a su juicio, reveló que quería "tensión y crispación". "Es lo que ha hecho a lo largo de estos cuatro años --enfatizó--. Sembró tensión, discordia y división mientras hablaba de entendimiento, de convivencia y de talante. Ese es el señor Rodríguez Zapatero. Creó problemas y muchos a los españoles, luego puso cara de seminarista y le echó la culpa al PP. Esa es la historia de esta legislatura".

"CALDO Y CHAMPAN CON EL NUNCIO".

A su juicio, "viven obsesionados con la crispación porque creen que eso les da votos" y como prueba de ello citó la reciente polémica entre el Gobierno y la Iglesia a raíz de la nota pastoral de los obispos. "Estuvieron 40 días arremetiendo con los obispos y a final terminaron tomando un caldo y champán francés en la casa del Nuncio", ironizó.

El líder de los 'populares' insistió en que el programa electoral de los socialistas consiste en "dar leña, estopa y caña" a su partido, algo que, en su opinión, se debe a que no tienen "balance, ni gestión ni una sola propuesta". Según agregó, el "mito del talante" de Zapatero "saltó por los aires" porque "la mentira quedó al descubierto y sus vergüenzas las vieron todos los españoles".

El jefe del Ejecutivo, prosiguió, ha "dividido a los españoles presentando un proyecto de discordia y ha manipulado las palabras". "El diálogo era con ETA, con ERC o con IU, pero no ha dialogado con la inmensa mayoría de los españoles, que representan al PP y a su propio partido al que ha traicionado", enfatizó.

Después entró en materia económica y destacó la subida de los precios y del paro. Señaló que Zapatero presume de "ser la envidia de Europa" porque "debe creer que todos viven como él". "Se la ha subido la Moncloa a la cabeza y se ha olvidado de la gente. Eso es lo que le ha pasado", proclamó, cosechando un aplauso.

VOTAR SIN MIEDO.

En este punto, recalcó que el cambio "ya no es sólo un deseo, es una necesidad nacional" porque el gabinete socialista se ha "olvidado de la gente" y se ha centrado en "discutir la nación y poner en tela de juicio la igualdad de los españoles y negociar con ETA", dos proyectos que se han saldado con un "rotundo fracaso".

Por ello, animó a votar pero "no con el miedo" que, según dijo, quieren algunos, sino con "alegría, sensatez y sentido común". También aprovechó esta parada en Burgos para anunciar que si llega al Palacio de La Moncloa se ocupará del Auditorio de Burgos, de la depuradora de esta provincia y del desvío ferroviario.