Rajoy promete gobernar "para el futuro y las personas" y no "para el pasado y las hectáreas"

Actualizado: sábado, 24 noviembre 2007 18:09


ROQUETAS DE MAR (ALMERÍA), 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP, Mariano Rajoy, se comprometió hoy a gobernar "para el futuro y las personas" si gana las próxima elecciones generales y no "para el pasado y las hectáreas", ya que, a su juicio, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "lleva cuatro años discutiendo sobre si somos una nación, o dos, o cuatro".

Durante su intervención en un acto público del PP en Roquetas de Mar (Almería), el líder del PP aseguró que el partido va a ganar los comicios de marzo y pidió la confianza no sólo de los que votaron al PP en 2004, sino también de "mucha gente que en otro momento de la historia reciente no apostó por nosotros porque creía que no era bueno para España y que ahora nos va a apoyar".

Rajoy anunció que la formación que preside no va a hablar "ni de la historia de España, ni de Franco, ni de Felipe V", sino de España y su futuro "que es lo que realmente quiere la mayoría de los ciudadanos", ya que España es una nación de personas "libres e iguales", lo que "no se discute ni se pone en tela de juicio".

Asimismo aseguró que el PP está hoy "en el mejor momento político" desde el año 2000 porque "en los años en los que todos nos decían que estábamos solos" había dirigentes del PP, alcaldes, concejales, militantes y simpatizantes, "que no nos dejaron solos y defendieron "contra viento y marea" sus ideas y principios.

Para Rajoy, España "precisa un cambio político" porque "las cosas se pueden hacer infinitamente mejor", por lo que, según él, el PP ganará las elecciones "sólo para hacer las cosas mejor y para que los españoles vivan mucho mejor".

El presidente del PP criticó además que España es el país donde más han subido los precios y donde un litro de leche cueste "prácticamente igual" que un litro de gasóleo, un incremento que, según señaló, "no pasa porque sí", sino que sucede "cuando uno se duerme en los laureles y no sabe fijar su prioridad".

En este sentido, adelantó que el PP se ocupará de la economía como en 1996 y reiteró que todo el que gane una cantidad inferior a los 16.000 euros anuales "no va a pagar ni un solo euro a la Hacienda Pública", como "un acto de justicia".

Asimismo se remitió a la reforma fiscal de 1998 que, según él, propició, al año siguiente, un aumento en la recaudación de 13 puntos porque se generó "confianza, credibilidad e inversiones", lo que derivó en más contribuyentes y un incremento de la riqueza, y subrayó su apoyo a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), que crean entre el 80 y el 90 por ciento de los puestos de trabajo en España y tienen "derecho" a "que se piense en ellas y no en la Alianza de Civilizaciones".

Rajoy, que antes del acto en el auditorio roquetero visitó un taller de mujeres víctimas de violencia de género, incidió también en la obligación de cualquier administración de erradicar estas situaciones y adelantó su "compromiso" para los próximos cuatro años de "no tolerar" estos casos.

En esta línea alegó que hará "lo posible y lo imposible" para que las situaciones personales de cada una de estas mujeres "no se repita" y, si se reiteran, "que vean que hay una política a la altura de las circunstancias que las respalda y les transmite su afecto y ayuda".

Rajoy se refirió también a las necesidades hídricas de algunas partes del territorio español y criticó que "se ha pasado de la demanda de agua para todos a la de agua para nadie", puesto que la "solución" del Ejecutivo central ha sido "no hacer nada" cuando un Gobierno está obligado a tomar medidas y decisiones "gusten o no".

El líder del PP se comprometió a trabajar para resolver el problema del agua "en Aragón, en Cataluña, en Valencia, Murcia, Andalucía o Castilla-La Mancha", llegando además a un consenso con el principal partido de la oposición, porque "el agua que hay en España es de todos de la misma manera que España es de todos y no de unos pocos por listos".

En su discurso abogó igualmente por la inmigración legal a través del control de fronteras, la ampliación del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) y la contratación en origen y avanzó la creación de una agencia de contratación y empleo a nivel nacional.

Rajoy apostó por una nación "de ciudadanos libres e iguales", pero matizó que los ciudadanos tienen que tener "los mismos derechos pero también las mismas obligaciones".