Rajoy reformará la Constitución para fijar las competencias básicas del Estado y acabar con la subasta de transferencias

Actualizado: domingo, 18 noviembre 2007 17:56

Propondrá en el Parlamento una declaración institucional con el compromiso de que no negociará con ETA

Defiende un "nuevo consenso" que devuelva la "estabilidad perdida" y cierre "las grietas que se han abierto estos cuatro años"

MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -

El líder del PP, Mariano Rajoy, aseguró hoy que si gana las próximas elecciones generales llevará a cabo una reforma "limitada" de la Constitución que fije un núcleo básico de competencias del Estado y acabe con la "subasta de transferencias" que, según dijo, está conduciendo al "desmantelamiento" del Estado. Además, señaló que propondrá en el Parlamento una declaración institucional "con el compromiso de que no existirá ninguna negociación política con ETA".

Rajoy hizo estas promesas en la jornada de clausura de la Conferencia Política del PP --en el Pabellón Madrid Arena de Madrid--, un cónclave que ha reunido durante tres días a los dirigentes del partido con el objetivo de debatir algunas de las líneas principales del programa electoral que ofertarán en marzo a los ciudadanos.

Alrededor de doce mil personas --según fuentes de la organización-- escucharon el discurso de Mariano Rajoy, que estuvo arropado por toda la cúpula del partido. El líder de la oposición tuvo como teloneros a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y al alcalde de la capital, Alberto Ruiz Gallardón, ambos con sendas intervenciones en 'clave de política nacional'.

"DISPARATES ENCADENADOS".

Ante un auditorio entregado --que le interrumpió numerosas veces al grito de 'Oé, Oé Mariano Presidente--, Rajoy presentó al PP como un partido "preparado para superar el estancamiento de cuatro años", en los que, a su juicio, se han sucedido los "disparates encadenados". Frente a ello, dijo, el PP tiene un proyecto. "El único que hay, dicho sea de paso. Si los otros tienen alguno, nadie lo conoce. O no quieren presentarlo o no es presentable o les faltan sabios".

Aseguró que, después de unos años de "ocultaciones, engaños, cortinas de humo y maniobras de distracción", la gente necesita que el PP sea "transparente". Y el PP, recalcó, es "previsible" y no "hace experimentos con la nación" y no tiene nada que "esconder".

"Somos transparentes, no albergamos ningún proyecto delirante que precise sombras o disimulos para que los españoles se den cuenta de lo que se les está cocinando: un día con ETA, otro con las opas de las empresas, otro con la Constitución* hasta las obras del AVE las esconden, que es lo que faltaba", enfatizó.

CONSTRUIR UN NUEVO CONSENSO.

Dicho esto, apostó por "asegurar los cimientos" y para ello, fijó como labor "urgente" la de construir un "nuevo consenso que devuelva la estabilidad perdida en esta legislatura". "En estos cuatro años hemos visto caer pulverizados todos los acuerdos nacionales que nacieron en la Transición. Es urgente recuperar un terreno común de entendimiento sobre cuestiones fundamentales. España tiene que dejar de ser una excepción en este terreno", proclamó.

Por eso, dijo que lo primero que hará si gana las elecciones, será llamar al principal partido de la oposición y tratar de establecer ese nuevo consenso institucional que "despeje cualquier duda sobre las cosas que no se tocan o que se tocan de común acuerdo, porque son patrimonio de todos los españoles y no pueden estar al arbitrio de cualquier gobernante", precisó.

Para Rajoy ese nuevo consenso debe establecer que "España no alberga más que una sola nación" de ciudadanos libres e iguales en derechos y en obligaciones y que el Estado de las Autonomías es el que recoge "toda" la Constitución, no sólo el título VIII.

En este plano urgió a llevar a cabo una reforma constitucional que "corrija los defectos de funcionamiento" del sistema con el objetivo de terminar con "la subasta de transferencias" que está llevando al "desmantelamiento" del Estado. Señaló que el modelo autonómico no puede estar "permanentemente abierto" y abogó por garantizar la existencia de un Estado viable que fije un núcleo básico de competencias del Estado que sean intransferibles.

Además, defendió la conveniencia de establecer en Las Cortes mayorías de dos tercios para "todas las reformas que afecten al bloque constitucional o a las principales instituciones del Estado" porque "no es razonable", indicó, que hoy se exijan dos tercios para elegir al Consejo de Radio Televisión Española y, en cambio, un Estatuto de Autonomía "se apruebe por mayoría simple".

GARANTIZAR POR LEY EL DERECHO A UTILIZAR EL CASTELLANO.

En este mismo capítulo del 'nuevo consenso' Rajoy englobó su compromiso de garantizar "por ley el derecho a utilizar y a aprender el castellano en todas las etapas del sistema educativo en toda España". "Es también necesario garantizar la capacidad de Las Cortes para regular la política educativa y lingüística", agregó.

A continuación, anunció su intención de acabar con "el chalaneo de los resultados electorales" para que gobierne el partido más votado y de esta manera, dijo, lograr que los ciudadanos vean que su voluntad cuenta. En los últimos meses los 'populares' se han quejado de que los pactos poselectorales les dejan fuera de los órganos de gobierno y por ello quieren una reforma de la Ley de Régimen Electoral General para garantizar que gobierne la lista más votada.

En política antiterrorista, Rajoy destacó hoy la necesidad de evitar que se "negocie" con los terroristas. "No es razonable que se consulte a los terroristas sobre sus deseos o el precio de su silencio. Propondremos que el Parlamento apruebe una declaración institucional manifestando el compromiso de que no existirá ninguna negociación política con ETA. El terrorismo no admite más solución que la rendición o la derrota", resaltó.

RECUPERAR EL PRESTIGIO EN POLITICA EXTERIOR.

Además, reivindicó la necesidad de recuperar el prestigio de España en el exterior porque "no es razonable que un país democrático defensor de las libertades individuales" se "alinee con los tiranos frente a los disidentes tanto en Cuba como en Venezuela". En su opinión, "la política exterior de España debe ser la que corresponde a la dignidad" de la nación, como "un instrumento fundamental para defender la seguridad de nuestros compatriotas y los intereses de las empresas" españolas.

A renglón seguido, criticó que, en lugar de "aunar esfuerzos y fomentar la unidad", se siembre "cizaña" entre los españoles. "Echaremos hasta siete llaves a la tumba del sectarismo y la discordia", remachó, tras subrayar que el PP no permitirá que "nadie alimente enfrentamientos de ningún tipo entre españoles". "Se cerrarán todas las grietas que nos han abierto estos cuatro años", continuó.

En la última parte de su discurso volvieron a destacar las críticas al Ejecutivo socialista que, a su juicio, ha "malgastado cuatro años". "Sería suicida que perdiéramos más", exclamó, para añadir que las propuestas anunciadas por el PP son "posibles" si se sale de este "marasmo". "Los españoles tienen que decidir", resaltó.

"HAY FUTURO, HAY ESPERANZA".

Un día más Rajoy puso el acento en la educación y explicó que el objetivo debe ser que España pueda competir en el mundo "en el mismo nivel" que países como Francia, Alemania y Gran Bretaña. "Para ello es fundamental acabar con un modelo educativo considerado de tercera clase", recalcó, para agregar que si el PP gana las elecciones realizará una reforma de todo el sistema educativo. A su juicio, la educación "es la única garantía de la igualdad real entre los españoles" y es la "piedra angular" del futuro de España.

Dedicó sus últimas palabras a convocar a todos los españoles a un nuevo consenso y se mostró convencido de que el PP ganará las elecciones "con una diferencia muy importante" con respeto al PSOE. "Os lleváis una alternativa sólida, responsable y adulta. Hay futuro, hay esperanza", concluyó.