No afectará a la ayuda de emergencia, ni a los programas de la AECID en países socios ni a las subvenciones a ONG de Desarrollo
MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, ha confirmado hoy en sede parlamentaria que el recorte de 800 millones de euros que el Gobierno hará en la ayuda al desarrollo entre este año y el siguiente afectará a las contribuciones de España a los organismos multilaterales, algunas de las cuales se reducirán "de forma proporcional y teniendo en cuenta algunas prioridades estratégicas" de la actuación de España.
En 2009, el dinero que el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación destinó a estos organismos alcanzó los 1.292 millones de euros, de los que un 75 por ciento se concentró en una decena de agencias, entre ellas el Banco Mundial, el Programa Mundial de Alimentos, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, que juntas las tres recibieron la mitad de ese presupuesto, según los datos que aportó en la Comisión de Cooperación Internacional del Congreso.
Le siguen Unicef, el Fondo Regional para el Apoyo a la Pequeña y Mediana Empresa en Africa, el Fondo de Adaptación al Protocolo de Kioto, la FAO, la UE, el Fondo de la ONU para la Población y el Fondo de la ONU para la Mujer (Unifem).
En 2003, ese dinero a los organismos multilaterales no llegaba a los 80 millones de euros, por lo que Rodríguez justificó que sea aquí donde se concentre el ajuste dado el crecimiento "extraordinario" que en los últimos años han registrado estas partidas.
Aunque los recortes de la ayuda al desarrollo que el Gobierno ha decidido dentro de su plan de ajuste para controlar el déficit no figuraba en el orden del día, la secretaria de Estado se refirió a ellos en su intervención inicial y centraron las preguntas de los portavoces de los grupos.
Rodríguez afirmó que la "prioridad" del Gobierno es que el recorte no afecte a "la acción humanitaria y de emergencia", ni a los programas bilaterales que la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) gestiona directamente con los países socios ni a las subvenciones de la AECID a las ONG de desarrollo que actúan en países socios de la cooperación española.
El Gobierno evitará también que los recortes previstos de 300 millones de euros este año y de 500 en el próximo alteren las principales apuestas del Gobierno español, "en particular la lucha contra el hambre y la pobreza extrema", subrayó.
Rodríguez no pudo aportar más datos porque el Gobierno está trabajando para determinar exactamente de dónde se sacará el ahorro y además quiere hablar y negociar antes con los organismos internacionales que se verán afectados para que los recortes tengan el menor impacto posible, pero se mostró dispuesta a acudir a informar a la Cámara en cuanto cuente con una propuesta concreta.
A preguntas de la diputada de Nafarroa Bai, Uxue Barkos, Rodríguez sí garantizó que ningún proyecto de desarrollo "importante" se verá "comprometido" por la reducción de las contribuciones voluntarias de España a organismos multilaterales.
Soraya Rodríguez reiteró que los recortes no permitirán conseguir el objetivo que el Gobierno socialista se autoimpuso de destinar el 0,7 por ciento de la Renta Nacional Bruta (RNB) a ayuda al desarrollo en 2012, pero aclaró que ese compromiso sigue siendo "irrenunciable" para el Ejecutivo, que quiere convertirlo en un objetivo vinculante.
IMPROVISACIÓN
El portavoz de Cooperación del PP, Gonzalo Robles, consideró que el hecho de que la secretaria de Estado no pudiera hoy concretar a qué partidas afectará el ajuste profundiza en la "impresión" que tienen, a su juicio, los españoles con respecto a que este recorte ha sido "impuesto" e "improvisado".
Advirtió de que el recorte afectará a la "credibilidad" y "previsibilidad" de España, después de que el Gobierno haya hecho todo tipo de "declaraciones contundentes" afirmando que "la ayuda a los países más pobres no debe estar condicionada por la crisis", que era "posible" aumentarla en momentos difíciles y que el Ejecutivo no iba a dar "un paso atrás" en sus compromisos de ayuda al desarrollo, citando algunas frases empleadas tanto por Rodríguez, como por el ministro Miguel Angel Moratinos y el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
El representante de CiU, Carles Campuzano, también consideró que este "aterrizaje en la realidad" pone de manifiesto que "una excesiva retórica" en esta política "nunca acompaña al Gobierno en situaciones difíciles".
En su opinión, "chocaba" desde hacía tiempo que un país con un 20 por ciento de paro, con una tasa de fracaso escolar cercana al 30 por ciento, y con una política "mejorable" de formación permanente de sus trabajadores "pretendiese convertirse en líder de la ayuda al desarrollo".
Ante estas críticas, Rodríguez destacó que España ha crecido en estos años de Gobierno socialista "como ningún país en la comunidad de donantes en un periodo tan corto", llevando la ayuda oficial al desarrollo del 0,23 por ciento de la Renta Nacional Bruta (RNB) en 2003 al 0,47 en 2009.
Recordó también que el Gobierno del PP redujo la ayuda al desarrollo en 2002 y 2003, en un contexto de crecimiento económico, y la mantuvo año tras año en el 0,23 por ciento de la RNB. También señaló que ante el primer anuncio del Gobierno de recortar la ayuda al desarrollo, el líder del PP, Mariano Rajoy, abogó por que la reducción fuera mayor.
El portavoz socialista, Joan Calabuig, sostuvo que el Gobierno no improvisa sino que, como otros países de su entorno, responde a una "crisis sin precedentes" con "muchísima rapidez".
