Rosa Diez planteará en el Congreso revisar las pensiones parlamentarias para suprimir "su corralito"

Actualizado: domingo, 7 febrero 2010 12:19

La medida se pensó especialmente para políticos de la Transición que, al venir del exilio, no habían cotizado nunca, aseguran las Cortes

MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

La diputada de Unión, Progreso y Democracia en el Congreso (UPyD), Rosa Díez, está preparando una proposición no de ley para que se revise el sistema de pensiones por el que se rigen los diputados y senadores, con el objetivo de que los parlamentarios dejen de tener "su propio corralito".

La propuesta del Gobierno de ampliar la edad de jubilación a los 67 años y revisar el periodo de cálculo de las pensiones ha puesto de manifiesto el contraste con el régimen que rige para los diputados y senadores desde 2006 y que a los 65 años les garantiza llegar a la pensión máxima habiendo estado al menos once años como parlamentario.

En declaraciones a Europa Press, Díez explicó que, desde su punto de vista, los parlamentarios no tendrían que regirse por un método distinto al del resto de los ciudadanos. "Si el sistema se justifica por que no cobramos el desempleo, quizá tendríamos que cobrarlo", comentó la líder de UPyD.

Tras recalcar que no quiere hacer "demagogia" con esta cuestión, Díez subrayó que "es evidente y obvio" que si se debate sobre la modificación del sistema de pensiones en general, habrá que hablar también de las de los parlamentarios.

"Y eso habría que hacerlo también en el marco del Pacto de Toledo porque es ahí donde tenemos que estar los diputados y no en un corralito aparte, porque eso no tiene sentido", insistió, aún haciendo hincapié en que ni la revisión general del sistema que defiende UPyD ni la introducción de cambios en el caso de los diputados "resolverían la crisis económica".

Con este panorama y asumiendo que el resto de partidos pueden tachar la iniciativa de "oportunista", Díez anunció que su formación ya está preparando una iniciativa para forzar a los diputados a pronunciarse sobre un eventual cambio en sus propias pensiones.

NI PSOE, NI PP, NI CIU SE OPONEN A REFORMARLO

Esta misma semana, la portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría, se mostró dispuesta a revisar también el sistema de pensiones de los parlamentarios alegando que su formación tiene claro que se debe "predicar con el ejemplo". "No tengo inconveniente de abordar éste y otros temas de funcionamiento de régimen interno", sentenció.

Tampoco han puesto reparos a la idea el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, y el portavoz del tercer grupo parlamentario del Congreso, el nacionalista Josep Antoni Duran i Lleida: "No me importa que se altere, no tendría ningún inconveniente en discutirlo", dijo el secretario general de CiU.

Cuando se le formuló la pregunta, el diputado de IU, Gaspar Llamazares, quiso dejar claro que el Parlamento no paga la jubilación completa de sus miembros, sino que les facilita un complemento en el caso de que no lleguen a la pensión máxima por su cotización profesional, que en su opinión "se cuentan con los dedos de una mano".

"Lo que tenemos es un complemento de pensiones con cargo al Parlamento y ese complemento puede discutirse --precisó--. Y si hay que ajustarse el cinturón, nos lo ajustaremos todos, como es natural".

El presidente del Congreso, José Bono, ha hecho hincapié en el escaso ámbito de aplicación de este complemento de pensión, pues la mayoría de loos dipyutados y senadores acceden a lo largo de su vida laboral a la pensión máxima. Según los datos del Congreso, de los más de 3.700 parlamentarios que han pasado por las Cortes en las tres últimas décadas, sólo unos setenta han accedido a esta pensión, todos ellos procedentes de la transición y en muchos casos oprocedentes de un exilio en el que nunca cotizaron a la Seguridad Social.