Los sindicatos representativos aseguran tras reunirse con Interior que firmarán la próxima semana y que se perseguirán conductas sancionables
MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Policías y guardias civiles convocados por la plataforma Jusapol (Justicia Salarial Policial) han protestado este jueves frente a la sede del PP en la madrileña calle de Génova en contra del acuerdo sobre equiparación que será firmado la próxima semana entre el Ministerio del Interior y los sindicatos y asociaciones representativos.
Los agentes que han secundado esta nueva protesta en Génova han lanzado consignas como "no más mentiras, equiparación", mostrando su discrepancia con las organizaciones mayoritarias que, en unidad de acción, han respondido 'sí' a la oferta de Interior. Custodiados por un cordón policial, varios centenares de manifestantes han cortado parcialmente el tráfico, gritando lemas como "Rivera presidente", "Yo soy Jusapol" o "sindicatos y PP, la misma mierda es".
Una treintena de sindicalistas se ha concentrado también este jueves desde las 9.00 horas a escasos metros de allí, frente al edificio del Ministerio del Interior en la calle Amador de los Ríos, en apoyo a los líderes de las organizaciones que se mantienen en la mesa de la negociación y que se han vuelto a reunir con el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto.
En esta reunión se ha pactado crear dos mesas de seguimiento del acuerdo que está previsto que se firme la semana que viene, una presidida por Interior y la otra para el ámbito de la Policía y la Guardia Civil. El acuerdo es impulsar
Según las organizaciones, el compromiso es que el dinero comprometido se ejecute aunque no haya presupuestos. Desde Interior se les ha trasladado que no se van a permitir tratos degradantes, hostiles o insultos entre policías, por lo que se estará vigilante ante comportamientos que sean sancionables desde el punto de visto disciplinario o penal.
Así lo han explicado en una circular cuatro sindicatos policiales y siete asociaciones de la Guardia Civil, todos los representativos menos ASP e IGC, que han denunciado que les han "expulsado" de esta última reunión en Interior. El martes renunciaron a realizar una consulta entre sus bases debido al "hackeo" lanzado 24 horas antes sobre la plataforma online que iba a contabilizar los votos de los afiliados.
Las organizaciones mayoritarias en los consejos de la Policía y la Guardia Civil han denunciado ante unidades especializadas de ambos cuerpos el "ataque delictivo" contra la web en la que pretendían someter a votación la propuesta de Interior. La plataforma Jusapol ha difundido en redes sociales un comunicado en el que avisan que "no vacilarán en apoyar la creación de un sindicato y una asociación profesional" si se firma el acuerdo sobre equiparación.
SUBIDAS DE 561 Y 720 EUROS DE MEDIA
La última oferta del Ministerio del Interior del 27 de febrero contentó a los sindicatos que continuaban sentados en la mesa de negociación, de la que se habían levantado días antes, tras subir la propuesta a 400 millones de euros en 2018 en el capítulo de sueldos y otros 100 para agentes en segunda actividad o en la reserva que quieran aceptar un empleo sin plus excesivo de peligrosidad.
La cifra se eleva hasta los 1.200 millones en tres años si se suman los 300 millones de la subida que les corresponde por ser funcionarios públicos, y que se computa finalmente aparte, al igual que otras inversiones en instalaciones y medios. Respaldan el acuerdo los sindicatos policiales SUP, CEP, UFP y SPP y las asociaciones de guardias civiles AUGC, UO, AEGC, APROGC, UnionGC, ASES-GC y APC.
Según los cálculos de Interior y de estos sindicatos, la equiparación con los Mossos d'Esquadra será una realidad en 2020, cuando un policía ganará 561 euros brutos más de promedio y un guardia civil, 720 euros.
La cantidad comprometida está sujeta a la elaboración de una auditoría externa, que se contratará esta próxima semana, además de aprobar una ley de retribuciones que evite la descompensación salarial entre diferentes cuerpos policiales. El acuerdo sobre equiparación policial ha despertado el interés de otros colectivos también deseosos de mejorar sus sueldos como los militares, los funcionarios de prisiones o los enfermeros y médicos.
