Seguridad dice que no hubo "inacción" de la Ertzaintza en los altercados del Foro Econmómico Mundial de Bilbao

Incidentes 3 marzo
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 31 marzo 2014 18:46

PP, PSE y UPyD denuncian la "falta de autocrítica" de la consejera, pero PNV y EH Bildu defienden la "proporcionalidad" de la actuación

VITORIA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Seguridad del Gobierno vasco, Estefanía Beltrán de Heredia, ha señalado que no hubo "inacción" de la Ertzaintza ni "extrañas órdenes" en su actuación durante los altercados producidos el pasado 3 de marzo en Bilbao con motivo del Foro Económico mundial. Por contra, ha defendido que se buscó "evitar riesgos mayores", ya que de haber "cargado" contra la manifestación, los altercados se habrían prolongado en el "espacio y tiempo".

La titular de Seguridad ha comparecido junto al director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, en comisión parlamentaria para explicar la actuación de la Policía vasca el pasado 3 de marzo cuando, con motivo de la celebración del Forum Global Spain 2014, se produjeron numerosos incidentes en la capital vizcaína.

Según ha señalado Beltrán de Heredia, la Ertzaintza ha recibido un total de 33 denuncias por los "actos vandálicos de aquel día", la "mayor parte" de ellos en la Gran Vía. Asimismo, ha defendido que haber "disuelto de inmediato por la fuerza" la manifestación que se desarrollaba en esos momentos, organizada por sindicatos y organizaciones sociales, hubiera "abierto escenarios no deseables, imprevisibles y de consecuencias probablemente más dramáticas".

"No fue una cuestión de falta de medios, extrañas órdenes, falta de previsión, inacción o miedos escénicos, como han querido utilizar algunos como arma arrojadiza contra la Ertzaintza y el Departamento. Fue el cambio táctico de los violentos que, conscientes de la imposibilidad de acercarse al Forum, cambiaron la táctica", ha justificado.

A su juicio, "cargar contra la manifestación" era lo que "los violentos" deseaban, pero ha advertido de que de haberlo hecho se hubiera "puesto en riesgo a los ciudadanos" y "la expansión de los altercados a otras calles hubiera tenido un efecto multiplicador en daños materiales y personales, prolongándose en tiempo y espacio".

"No disolver la manifestación fue una decisión ponderada que evitó riesgos mayores. La decisión de los responsables del operativo de seguridad fue la de comunicar a los convocantes de la manifestación la orden de interrumpirla y exigirles responsabilidad para disolverla de forma ordenada, de cara a facilitar la acción de la Ertzaintza", ha añadido.

"BOMBA DE VIOLENCIA"

Por su parte, el director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, ha manifestado que "los violentos", ante la llegada de los efectivos policiales, se refugiaron en la manifestación e "incitaron a la Ertzaintza a intervenir".

"Por un lado había que salvar a un grupo de personas que se manifestaban pacíficamente en pos de sus reivindicaciones y, por otro, controlar a un grupo reducido de violentos que deseaban reventar la manifestación y hacer estallar una bomba de violencia que se multiplicase por las calles de Bilbao", ha añadido.

En este contexto, ha defendido que una intervención de la Ertzaintza hubiese "sumado a los violentos" a un grupo de manifestantes que se habrían sentido "agredidos, encontrando razones para actuar violentamente y sumándose a los altercados". "Vehículos cruzados y quemados, medios de transporte inutilizados, comercios saqueados, personas heridas, hasta un escenario todo lo dantesco que cada uno quiera imaginarse", ha añadido.

Por todo ello, Gabirondo ha señalado que la Policía vasca tenía claro que "no podía realizar una intervención indiscriminada" y tenía que tratar de impedir estas acciones violentas con su presencia.

La consejera ha explicado que desde el 17 de febrero se celebraron hasta 13 reuniones de análisis, organización y coordinación para la seguridad de la Cumbre y que se movilizaron 688 ertzainas ese día, de los que 379 eran agentes en llamamiento libre. Esto generó unos gastos de 70.000 euros, de los que 2.700 euros eran en combustible.

En el núcleo más cercano al Museo Guggenheim se ubicaron 16 furgonetas de la brigada móvil, cuyos agentes estaban equipados "adecuadamente". En otro anillo de seguridad entre Gran Vía y la ría había otras 12 furgonetas y en el resto de Bilbao había 139 ertzainas con ocho furgonetas y patrullas móviles.

Tras señalar la "provocación" de los grupos violentos para que los ertzainas entraran en la Plaza Moyúa, donde había miles de manifestantes, la consejera ha reconocido que fue un día "complicado" para todos los agentes, en el que se llevaron a cabo 59 identificaciones, siete detenciones y una imputación.

Además, la Ertzaintza recogió evidencias para identificar a las personas que intervinieron en los actos de violencia, detenerlas y llevarlas ante la justicia. "Se han recogidos prendas abandonadas, muestras de sangre, etc. La investigación sigue su curso", ha indicado Beltrán de Heredia.

En esta línea, ha insistido en que el tipo de intervención policial concebido y previsto contra los violentos "obedeció a criterios de eficacia, proporcionalidad e idoneidad para priorizar la integridad física de los ciudadanos".

Tras señalar que los violentos no lograron sus objetivos y no tuvieron el escaparate de ocupar páginas en los diarios internacionales, ha reconocido que los daños causados fueron "graves y no se pudieron evitar". No obstante, ha denunciado que se mezclen cuestiones de seguridad con la critica política y que se convierta este tema en un rifi-rafe de las elecciones sindicales de la Ertzaintza. "La imagen de inactividad de la Ertzaintza no refleja su actuación el día 3 en Bilbao", ha dicho.

GRUPOS

Tras escuchar las explicaciones de la consejera, la representante del PP vasco, Nerea Llanos, ha denunciado que ésta no ha realizado "ni la más mínima autocrítica, a pesar de lo que dicen los agentes, los representantes sindicales, con prácticamente unanimidad sindical, y lo que dice la ciudadanía, que considera que ese día la Ertzaintza no actuó bien". "No reconocen ni el más mínimo error y dicen que se cumplieron los objetivos. Salvo que el foro se realizó, la seguridad ciudadana no quedó garantizada y hubo momentos de grave inseguridad ciudadana", ha denunciado.

Por su parte, Mikel Unzalu (PSE) ha dicho no compartir el relato ofrecido por la consejera, "parte de los ciudadanos no comparten ese relato y todos los sindicatos de la Ertzaintza no comparten ese relato que no tiene absolutamente ninguna pizca de autocrítica".

En este sentido, ha denunciado la "autocomplacencia con lo ocurrido" y ha lamentado que Beltrán de Heredia "ha venido a decir que en circunstancias similares vamos a estar los mismos disturbios, sedes bancarias, comercios y mobiliario urbano atacados".

Por su parte, Gorka Maneiro (UPyD) ha pedido la dimisión de los máximos responsables del Departamento de Seguridad y de la Ertzaintza porque "no están capacitados para dirigirlo" y ha denunciado que no hayan hecho autocrítica, sino que digan que "para otras ocasiones van a actuar igual de mal". "El dispositivo de la Ertzaintza del 3 de marzo fue absolutamente lamentable, inaceptable y no se cumplieron los objetivos que cualquier gobierno serio tendría y, sobre todo, garantizar la libertad y seguridad de los ciudadanos".

El parlamentario de EH Bildu Oskar Matute ha destacado que en la actuación de la Ertzaintza ese 3 de marzo hubo "una cierta atención al principio de proporcionalidad", mientras Iñigo Iturrate (PNV) ha reconocido el trabajo de la Ertzaintza esa jornada, ha reconocido que hubo "incidentes graves", pero "se evitaron incidentes más graves, mayores daños materiales y personales".

"Aunque no se puede estar satisfecho de que se produzcan los incidentes, la actuación de la Ertzaintza ese día no da para tanta crítica, hasta el paroxismo de pedir la dimisión de los responsables del Departamento de Seguridad", ha concluido.

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