La Síndica alerta del "muy escaso" grado de ejecución de la legislación valenciana en materia de contaminación acústica

Actualizado: sábado, 12 enero 2008 14:48


VALENCIA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El informe de la Sindicatura de Greuges correspondiente al año 2006 señala que es "muy escaso" el grado de ejecución práctica de numerosas previsiones de la legislación valenciana de contaminación acústica, que data de 2002, en particular en aspectos como los niveles de planificación acústica y la declaración de zonas como acústicamente saturadas. La institución ha tramitado "numerosos" expedientes en los que se toleraba el funcionamiento sin licencia de distintos tipos de locales.

El documento, consultado por Europa Press, subraya que el problema de la contaminación acústica está presente en la mayoría de las quejas tramitadas en materia de medio ambiente por la Sindicatura y se produce generalmente por el funcionamiento "anormal" de establecimientos comerciales o de ocio, principalmente con ambientación musical.

La Síndica afirma que el funcionamiento de estos locales sin licencia es "a menudo tolerado por las corporaciones locales", que reaccionan "con suma lentitud ante las denuncias ciudadanas". Al respecto, recalca que en muchas de las quejas se puede observar que la reacción frente a este tipo de situaciones es "lenta y a menudo ineficaz".

En este punto, la institución defiende que la imposición de medidas correctoras adicionales a las presentes en la licencia "debe resolverse con la mayor rapidez posible", ya que, mientras no sea así, las molestias acústicas "persistirán en perjuicio de los vecinos". El informe advierte de que la inactividad en este campo o la "actividad retardada no se justifican en absoluto y pueden dar lugar a la aparición de responsabilidad patrimonial de la Administración por los perjuicios causados".

La Síndica destaca la promulgación en mayo de 2006 de la ley de Prevención de la Contaminación y Calidad Ambiental, que, junto a la de Espectáculos Públicos y Contaminación Acústica, "forman un corpus legislativo completo cuya eficacia real dependerá de su aplicación efectiva en el ámbito municipal". La institución recogió en 2006 un total de 215 quejas en materia de medio ambiente, de las que 120 corresponden a problemas relacionados con la contaminación acústica.

El resto de quejas tratan sobre el acceso a la información ambiental, salud ambiental, vertederos, aguas residuales, animales, impacto ambiental, energías renovables, espacios naturales protegidos, patrimonio forestal, vías pecuarias y contaminación atmosférica.

En materia de salud ambiental, la Síndica recomienda la aprobación en la Comunitat Valenciana de una disposición general, "al igual que han hecho otras comunidades autonómas del Estado", que concrete el régimen de las instalaciones generadoras de contaminación electromagnética.

Afirma que en este tema "nos encontramos ante un ámbito de incertidumbre científica, lo que, sin embargo, no ha motivado la inactividad del legislador", ya que han ido surgiendo "distintas normativas a nivel comunitario, estatal, autonómico y municipal que tratan de encauzar la intervención administrativa en este sector".

La institución también ha recibido "numerosas" quejas que tienen que ver con actividades públicas o privadas que tienen efectos perjudiciales sobre el medio ambiente y cuya implantación precisa de controles ambientales singulares.