Solbes asegura que hay "margen de maniobra" para pactar una financiación "más justa y satisfactoria" que la de 2001

Actualizado: martes, 19 febrero 2008 21:25

BARCELONA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Economía y número dos del PSOE a las elecciones generales, Pedro Solbes, aseguró hoy que el Gobierno central tiene hoy "margen de maniobra" presupuestario para llegar a un acuerdo con el Gobierno catalán para establecer un nuevo sistema de financiación autonómico para Catalunya que suponga "una solución más justa y satisfactoria que la que se encontró en 2001", cuando los Gobiernos de CiU y PP pactaron la última reforma de la financiación catalana.

En una conferencia organizada por Pimec en el Auditorio de la ONCE de Barcelona, Solbes defendió la situación económica que atraviesa hoy el Estado, asegurando que permitirá "afrontar sin ningún tipo de inconveniente" los compromisos que el PSOE ha adoptado en su programa electoral en materia de inversiones y que será también "fundamental" para Catalunya.

Solbes reconoció que cualquier gobierno que salga de las elecciones del 9 de marzo deberá "prestar atención" a la financiación catalana, dado que "el Estatut da unas pautas de definición de esa financiación".

Aun así, insistió en desvincular esta negociación de la publicación de las balanzas fiscales, asegurando que "no hay una relación de causalidad automática" entre ambas y que, de hecho, el grupo de trabajo sobre balanzas fiscales del Gobierno ha concluido que "de las balanzas no se puede concluir un sistema de financiación". "No hay una cifra mágica, ni fulano es deudor neto puro ni perceptor neto puro si no se cuenta con qué metodología" se ha calculado, remarcó, aunque admitió que las balanzas son "un instrumento útil e importante".

Solbes quiso dejar claro que "Catalunya es una de las comunidades que transfieren recursos" al resto de autonomías, algo que "está muy claro en Catalunya pero no tanto en el resto del Estado", pero reiteró que existe "un problema de metodologías" a la hora de calcular cuánto aporta y cuánto debe cada comunidad.

El ministro defendió que esta legislatura ha sido el periodo en el que "se ha avanzado más en la transparencia fiscal de la democracia", dado que "por primera vez se ha puesto en marcha un grupo de trabajo en el Instituto de Estudios Fiscales para analizar los datos y las metodologías para la publicación de las balanzas".

Sin embargo, explicó que de esos dos supuestos no sale automáticamente una determinada cifra, porque incluso con esas metodologías, para la imputación de las distintas cifras, hay que partir de ciertos supuestos" que no son de común acuerdo entre los expertos.

En general, Solbes insistió en remarcar que el superávit alcanzado en esta legislatura otorga al Gobierno "margen de maniobra" para llevar a cabo las inversiones que el PSOE prevé en infraestructuras (80.000 millones de euros en total), en I+D+i y en Educación. Aun así, remarcó que "el presupuesto debe manejarse de forma juiciosa" en caso de "tener que ir a expansiones fiscales generalizadas para mantener la estabilidad presupuestaria". Así, subrayó que el debate actual en Europa a este respecto señala que se disponen de los "instrumentos para que aquellos países que dispongan de margen de maniobra fiscal puedan utilizarla". No obstante, dijo ser "partidario de mantener la presión fiscal" actual, que señaló que es "la tercera más baja de la UE". Así, rechazó rebajar los impuestos, pero también aumentarlos, señalando que el nivel actual "es suficiente para garantizar los servicios" necesarios.

Solbes reconoció que el programa electoral del PSOE plantea algunas reducciones fiscales, así como la devolución de 400 euros del IRPF, y aseguró que el partido ha calculado "una cantidad de recursos que le parecen manejables en función de lo que dispone" hoy el Gobierno.

Reconoció que el PSOE no plantea una reforma del impuesto de sociedades y señaló que, para el de sucesiones, su deseo sería el de "tener un mínimo común razonable aceptado por todos, seguramente más bajo que el que existe ahora, y un margen de maniobra más limitado por parte de las comunidades autónomas", aunque admitió que estas cuestiones deben ser "debatidas con las comunidades". Solbes definió como "éxito global" la política económica del PSOE en esta legislatura, aunque admitió que los objetivos "se han alcanzado sólo parcialmente" y que "factores externos han acentuado los problemas de todo proceso de globalización". En general, aseguró que, en los próximos años, la aprobación de nuevos proyectos de infraestructuras nunca será un problema de "financiación".

Aunque aseguró que no puede hablarse de "recesión económica", sí reconoció que existen "ciertos problemas" que provocan una "ralentización de la actividad económica", como el caso hipotecario o los problemas con el precio del crudo. Ante ello, dijo ser consciente de que "no hay remedios milagro", pero aseguró que España está "mejor preparada que el resto de colegas europeos para hacer frente a esta situación", porque el Gobierno "ha hecho más reformas que ellos y por la capacidad empresarial, que ha demostrado a lo largo de la historia que es capaz de adaptarse a los nuevos retos".