Está siendo trasladado a la cárcel de Zuera (Zaragoza), desde donde volverá mañana a las 10 horas para concluir las pruebas
PAMPLONA, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
Jaime Giménez Arbe, 'El Solitario', salió a la 13.35 horas del Palacio de Justicia de Pamplona tras permanecer casi tres horas en su interior y ser sometido a la prueba pericial psiquiátrica que ha ordenado el juez que instruye la causa por el asesinato de dos guardias civiles el 9 de junio de 2004 en Castejón. En estos momentos está siendo trasladado a la cárcel de Zuera (Zaragoza), donde permanece ingresado mientras se instruye la causa por los dos crímenes.
Mañana volverá a ser trasladado al Palacio de Justicia de Pamplona para concluir con la prueba pericial psiquiátrica. Está prevista su llegada a la sede judicial a las 10 horas.
Hoy, a la 13.25 horas se dieron por concluidas las primeras pruebas que se realizaron en la clínica forense ubicada en el Palacio de Justicia de Pamplona. 'El Solitario' salió diez minutos después en un furgón de la Guardia Civil por el garaje.
El informe pericial, cuyo resultado no ha trascendido, fue realizadas por un psiquiatra del Hospital Virgen del Camino de Pamplona y por un médico forense especialista en psiquiatría del Instituto Navarro de Medicina Legal.
Según fuentes judiciales que pudieron ver a 'El Solitario' dentro del Palacio de Justicia, Jaime Giménez Arbe se encontraba serio, sin hablar, y con el mismo atuendo que en su visita a los juzgados de Tudela, es decir, con un anorak verde, unas botas y un pelo muy largo.
El imputado llegó sobre las 10.30 horas al Palacio de Justicia custodiado por otros tres coches del Instituto Armado. Durante 15 minutos el convoy se detuvo a las puertas del juzgado de guardia del Palacio de Justicia mientras la Guardia Civil y la Policía Foral estudiaban cómo trasladar a Giménez Arbe al interior del edificio. Finalmente, su ingreso al Palacio de Justicia se hizo por el garaje, al igual que la salida.
En los alrededores de la sede judicial se congregaron varios curiosos, así como en las ventanas de los edificios más cercanos. Sin embargo, no pudieron ver al imputado
