MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Supremo da vía libre, desde el punto de vista jurídico, a los contactos con Batasuna. La Sala de lo Penal del Alto Tribunal ha rechazado la querella presentada por el sindicato de funcionarios Manos Limpias contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el secretario de Organización del PSOE, José Blanco; el secretario general del PSE, Patxi López, y el coordinador del PSE, Rodolfo Ares, por la reunión que mantuvieron estos dos últimos con representantes de Batasuna el pasado mes de julio. El Supremo afirma que este encuentro no es delito, y va más allá al calificar de "fraude constitucional" que se intente "corregir" la política del Gobierno a través de la Justicia, una labor que, apunta el tribunal, corresponde "específicamente" a las Cortes Generales.
La querella que presentó Manos Limpias ante el Supremo sostenía que los dirigentes socialistas habían incurrido en delitos de prevaricación, desobediencia y quebrantamiento de medida cautelar -en relación con la sentencia que ilegalizó Batasuna en 2003- por la reunión que el pasado 6 de julio mantuvieron en un Hotel de San Sebastián con los dirigentes de Batasuna, Arnaldo Otegi, Rufi Etxeberria y Olatz Dañobeitia.
En su auto, el Alto Tribunal, al igual que ya hizo la Fiscalía, afirma que estos hechos no son "constitutivos de ilícito penal alguno". En este sentido recuerda que para haya delito de desobediencia es necesario que, previamente, exista una prohibición expresa de alguna acción, como sería la de reunirse con los integrantes de Batasuna. "Sin orden expresa, no puede existir negativa abierta a su cumplimiento", argumenta el Supremo.
Además, recuerda que, a pesar de que los tribunales "pueden ser llamados a controlar la acción del Gobierno", esta función está "específicamente atribuida a las Cortes Generales". En este sentido el auto señala que supondría un "fraude constitucional" que "alguien pretendiese, mediante el ejercicio de la acción penal y la puesta en marcha de un proceso de la misma naturaleza, corregir la dirección de la política interior o exterior" que la Constitución "encomienda al Gobierno democráticamente legitimado".
CONTRADICE AL TSJPV
Esta decisión del Supremo contradice la de del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) que decidió, en contra del criterio de la Fiscalía, admitir a trámite la querella del Foro de Ermua contra el lehendakari, Juan José Ibarretxe, por su reunión representantes de Batasuna el pasado mes de abril. En este caso, el tribunal decidió investigar un presunto delito de desobediencia respecto a la sentencia del Supremo, una decisión que el Gobierno de Vitoria ya ha sido recurrido ante el Tribunal Constitucional.
El TSJPV también está pendiente de decidir sobre la admisión a trámite de las querellas presentada por el PP y el Foro de Ermua contra López y Ares por ese encuentro con Batasuna. La Fiscalía vasca ya se pronunció la semana pasada al respecto argumentando que ni López ni Ares son destinatarios directos de la sentencia del Tribunal Supremo que ilegalizó Batasuna y que no existía orden expresa del Alto Tribunal para que "anularan la cita", y, por tanto, tampoco existe delito y pide al TSJPV que no admita denuncias.
Hay que recordar que la reunión entre PSE y Batasuna recibió la autorización previa del magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón horas antes de su celebración. Garzón entendía que prohibir la reunión excedería del ámbito de la suspensión de actividades de Batasuna que se decretó decretada el pasado mes de enero en cumplimiento de su sentencia de ilegalización.
