MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha confirmado la condena a 7 años de cárcel impuesta el pasado mes de marzo por la Audienci Nacional a Said Lachhab por colaboración con organización terrorista en relación con la captación de otros jóvenes que realizó para el DAESH.
El alto tribunal rechaza todos y cada uno de los motivos del recurso presentado por la defensa de Lachhab y destaca la existencia de prueba suficiente para acreditar la "relevancia y persistencia de su labor" en la organización terrorista, a la que enviaba jóvenes por él captados.
POSIBILIDADES DE MUERTE EN ZONAS DE CONFLICTO
Considera además que la sentencia recurrida cuenta con el "suficiente grado de motivación" en la individualización judicial de la pena. Destaca además que el relato de hechos probados constata de forma objetiva la gravedad de la conducta, que consistió en la "captación de jóvenes para conducirlos a esa actividad tan peligrosa como es la de acudir a zonas de conflicto bélico y con elevadas posibilidades de acabar con la vida de las personas reclutadas y llevadas al lugar de conflicto".
Entre las pruebas contra Said Lachhab, que residía en Tolosa (Guipúzcoa), fue clave el testimonio de un testigo protegido que afirma que fue captado por el sospechoso después de que éste le contase que había regresado de Siria, donde había estado combatiendo en el Frente al Nusra.
En ese primer viaje, según el relato de hechos probados Lachhab se desplazó con otra persona a la que también había reclutado. Viajaron los dos juntos y tras llegar a Siria e incorporarse a la mencionada organización terrorista, ambos "fueron instruidos en el uso y manejo de armas de fuego" y combatieron.
Poco después, el acusado regresó, mientras que el otro hombre se quedó en Siria, donde falleció en septiembre de 2015 luchando con el Estado Islámico. de este primer viaje regresó Lachhab en octubre de 2013 y comenzó a reclutar a otra persona, el ahora testigo protegido, a quien explicó que ya había estado en zona de combate y le recomendó "mejorar su condición física" para prepararse para el viaje, pero esta vez ya no irían a afiliarse al Frente al Nusra, sino al Estado Islámico.
A lo largo de 2014, el testigo protegido "intentó hasta en dos ocasiones desplazarse a Turquía para llegar a Siria", siempre "siguiendo estrictas medidas de seguridad", aunque finalmente no lo hizo porque alguien de su entorno le convenció de que desistiera.
