'Temas' aconseja a los que criticaron su encuesta que daba empate PSOE-PP "identificar problemas y rectificar a tiempo"

Actualizado: miércoles, 27 diciembre 2006 14:23

El director de la publicación ve "pintorescas" las reacciones que suscitó el sondeo y pide no descalificar "al mensajero"

MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -

La revista 'Temas', que preside el socialista Alfonso Guerra, ha decidido responder a aquellos que pusieron en duda los resultados del sondeo de otoño que publicaron en su anterior número y que, entre otra cosas, revelaba que PSOE y PP, con una participación moderada, estarían prácticamente empatados en intención de voto. "Los políticos inteligentes saben que lo que tienen que hacer es identificar bien los problemas y carencias, cuando aún están a tiempo, y rectificar. Y, por supuesto, no romper espejos ni descalificar a los mensajeros", asegura José Félix Tezanos, director de la publicación.

Tezanos se pronuncia así en su artículo '¿Para qué sirven los sondeos electorales?. El síndrome de la madrastra', recogido por Europa Press y que es publicado en el número de enero de 'Temas para el Debate'.

En dicho artículo, tacha de "pintorescas" algunas de las reacciones que provocó la encuesta que otorgaba a los socialistas el 40,30 por ciento de los votos y a los populares el 39,70 por ciento, dejándolos sólo a seis décimas del partido que sustenta al Gobierno. Se da la circunstancia de que la dirección del PSOE restó importancia y credibilidad a ese sondeo, subrayando que "últimamente 'Temas' nunca acierta en sus encuestas".

Ante esto, el director de la revista ha aprovechado el número de enero para defender su estudio de opinión: "Personalmente, a nosotros tampoco nos gustaron los datos que reflejaba la investigación, pero en ningún momento se nos ocurrió falsificar o maquillar los resultados para evitar que alguien se pudiera molestar", apunta.

"Cuando los responsables políticos, o los consultores de confianza, se mosquean o reaccionan de mala manera ante determinados pronósticos políticos, en realidad lo que están haciendo es poner las bases para que los análisis que puedan encargar en el futuro sean filtrados de una manera tan cautelosa y amedrentada como para producir el famoso efecto 'pro-cliente' --prosigue--. ¡Cualquiera se atreve a molestar a un cliente si suele reaccionar de manera airada y despectiva cuando los pronósticos no le son favorables!".

"SÍNDROME DE MADRASTRA DE BLANCANIEVES"

No obstante, Tezanos recalca que las encuestas de opinión son solamente "un instrumento de análisis e información" y que los líderes políticos "inteligentes", que no están "contaminados por culturas aduladoras propias de la Corte ni por síndromes de ensimismamiento aislacionista", pueden obtener múltiples utilidades de los datos sociológicos.

En la misma línea, asevera que los sondeos pueden ayudar a programar y ajustar mejor los discursos de los políticos y sus estrategias de acción, "calculando sus impactos y eventuales resultados". "En las sociedades de nuestros días, algunos líderes han llegado a ser verdaderos maestros en el arte de auscultar y optimizar las posibilidades que ofrece un mejor conocimiento de la opinión pública", añade.

"Sin embargo, también hay responsables políticos que todavía no se han enterado muy bien de para qué sirven los sondeos. Incluso, no faltan aquellos que los utilizan prácticamente como un ornamento, o como un simple indicador de aceptación social --sentencia--. Para este tipo de responsables políticos, lo único que cuenta es si las cosas les van bien o mal, si se les quiere o no se les quiere. Y, por eso, sus reacciones ante los sondeos suelen ser más bien de tipo emocional o narcisista. Es lo que se conoce como el 'síndrome de la madrastra de Blancanieves'".

"EL ESPEJO CONTINÚA EN SUS TRECE"

Tezanos recuerda entonces que, en el cuento que da nombre a ese síndrome, la madrastra interrogaba al espejo, "versión añeja del sociólogo", preguntándole si había alguien en el reino que fuera más hermosa que ella. "Y cuando el espejo respondía de manera desfavorable, a sus expectativas montaba en cólera y arremetía contra el espejo y contra todo lo que se pusiera por delante. Incluso mandaba a un sicario a quietar de en medio a la competencia. Pero, aún así, el espejo continuaba en sus trece", avisa.

"Pero hoy no existen razones para preocuparse --concluye--. Nos encontramos entre gentes civilizadas y racionales, y los políticos inteligentes saben que lo que tienen que hacer es identificar bien los problemas y carencias, cuando aún están a tiempo, y rectificar. Y, por supuesto, no romper espejos ni descalificar a los mensajeros".