Condena la actitud de muchos agricultores que esparcen raticidas sin ningún control
VALLADOLID, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Castilla y León (Facua) expresó hoy su preocupación por las medidas adoptadas para acabar con la plaga de topillos, fundamentalmente por el uso indiscriminado de clorofacinona, y denunció públicamente su temor a que tales productos entren en la cadena alimenticia y se ponga en peligro la salud de las personas, y en especial de los niños, muy sensibles a estos productos químicos.
Ante ello, desde Facua, a través de un comunicado recogido por Europa Press, se condenó la actitud de muchos agricultores que "están esparciendo raticidas en el campo sin ningún control administrativo y exigió al Seprona y a los agentes forestales que denuncien a estos "irresponsables", a quienes "sólo les preocupa sus cosechas, aunque puedan estar poniendo en peligro la salud de los consumidores", para que sean sancionados y se les retiren las ayudas de la PAC.
Asimismo, la federación exigió a la Junta que durante los años 2007 y 2008 controle la trazabilidad de los alimentos que se produzcan en las tierras que han sido contaminadas con raticidas y realice los análisis necesarios para comprobar si en las próximas cosechas las plantas han absorbido estos productos químicos.
En este sentido, Facua quiere saber si los productos derivados de la uva, maíz, patatas, remolacha, cebada, trigo, girasoles, hortalizas, verduras, caza, pesca...estén libres de raticidas cuando lleguen al consumidor.
Además, la federación exige que se prohíba la caza y su consumo en toda Castilla y León hasta 2009, en aplicación del principio de presunción.
En el conjunto de medidas exigidas por la federación se incluyen el análisis del agua para el consumo humano durante 2007 y 2008 en todas las poblaciones de Castilla y León para comprobar que no están contaminadas con raticidas, ya que las aguas de lluvia arrastran estos productos y miles de ratones envenenados pueden caer en ríos y embalses, así como el derecho de Facua a asistir a todas las reuniones y comisiones de trabajo que celebre la Junta para tratar esta plaga o "catástrofe natural".
Finalmente, la organización pidió que, al igual que los ciudadanos cuentan con un seguro de vivienda y en caso de catástrofes naturales los daños corren por cuenta del Consorcio de Seguros, los destrozos causados por los topillos en las cosechas sean sufragados a través de esta misma vía, pero sólo para aquellos agricultores precavidos que tengan contratados agroseguros.
