MADRID, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional inició ayer el juicio contra tres terroristas de ETA, integrantes del 'comando' Madrid, por su presunta participación en un atentado con coche-bomba cometido el 6 de noviembre de 2001 en la calle Corazón de María de la capital y que provocó 97 heridos. Los tres terroristas se negaron a responder a ninguna de las preguntas que les formularon negando la legitimidad del tribunal y reconociendo su militancia en la banda.
"Lo único que tengo que decir es que soy militante de ETA", "no voy a responder nada", "no conseguirán condenarnos" o "no reconozco a este tribunal" fueron algunos de los argumentos que ofrecieron los terroristas al inicio de la vista para negarse a participar en el proceso. Los acusados son Manex Zubiaga, alias 'José', Lexuri Gallastegui, alias 'Nuria' y Ainhoa Múgica Goñi, a la que los funcionarios policiales que declararon hoy calificaron como la líder del complejo terrorista.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional pedirá previsiblemente casi 1.600 años de prisión para los dos primeros por aquel atentado con 97 heridos y que en un principio estaba dirigido contra el entonces subsecretario de Política Científica, Juan Junquera, colocando un explosivo en su coche, según defiende el Ministerio Público.
La fiscal Ana Noé considera que 'José' y 'Nuria' son culpables de la comisión de un delito de pertenencia a organización terrorista, depósito de armas, depósito de explosivos, robo de uso de vehículo, 97 asesinatos en grado de tentativa, 5 de asesinato en grado de conspiración, estragos y falsedad documental por lo que pide una pena de 1.583 años de cárcel para cada uno. Para Ainhoa Múgica pide una pena de 34 años de prisión por los delitos de pertenencia a banda armada, depósito de armas de guerra y depósito de explosivos.
Los dos acusados formaban en aquel momento parte del 'comando Madrid' junto a otras dos personas que ya han sido condenadas a más de mil años de cárcel por estos hechos, Ana Belén Egües y Aitor García. Estos dos terroristas comparecieron hoy en el juicio, pero también se negaron a contestar a ninguna pregunta antes de abandonar la sala dirigiendo gritos y gestos de ánimo a sus compañeros.
Según la Fiscalía, la detención de José y Nuria se produjo gracias a un ciudadano que sospechó que la pareja podía estar relacionada con el atentado por lo que decidió seguirles con su propio vehículo dando aviso a través de su móvil a la Policía. Los agentes policiales que declararon hoy, confirmaron que en los registros de los pisos que ocupaba el comando en Madrid, Salamanca y Toledo, se incautaron armas, placas de matrículas falsas y numerosa documentación así como efectos personales.
"SIN MI PERMISO AQUÍ NO SE VA NI DIOS"
Al inicio del juicio, el comportamiento de los policías que esperaban en el pasillo contiguo a la sala de vistas para prestar declaración como testigos provocó la reacción airada del presidente del tribunal, el juez Alfonso Guevara, dado el bullicio que estaban generando los agentes con su conversación.
"Le dice a todos los policías que se den una vuelta, pero que se la den de verdad, que se vayan a la calle y que se den una vuelta hasta que se les llame, que no hace falta que estén aquí molestando", le dijo el juez a una funcionaria.
Guevara, quien se quejó en varias ocasiones del calor reinante en la sala, protagonizó otro momento de enfado cuando, por un momento, pareció que uno de los testigos había abandonado la Audiencia Nacional en el momento de ser llamado a declarar. "Si estaba aquí esta mañana no se ha podido ir porque sin mi permiso aquí no se va ni Dios", enfatizó.
Minutos más tarde y después de que el testigo apareciese, el juez explicó que "por mucho que las partes puedan pedir lo que sea, aquí sólo se hace caso al menda". El juicio se reanudará mañana a partir de las 10.00 horas, "esperemos que con aire acondicionado", despidió Guevara.
