LUXEMBURGO, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Justicia de la UE, Mariano Fernández Bermejo, acusó hoy a países como Reino Unido e Irlanda de escudarse en la dificultad que tiene actualmente la UE de 27 países para tomar decisiones por unanimidad para frenar avances en la integración judicial europea, tal y como ocurrió este jueves con el bloqueo de directrices relativas a la cooperación en materia de garantías judiciales.
En el Consejo de Justicia e Interior que empezó este jueves en Luxemburgo, Reino Unido, Irlanda, República Checa, Malta y Chipre bloquearon la propuesta a favor del derecho de información, a una asistencia legal gratuita o a la interpretación o traducción de documentos en procedimientos penales que afectan a ciudadanos europeos en Estados miembros distintos a los suyos de origen.
Por el contrario, España, Francia, Bélgica, Luxemburgo e Italia mantuvieron una "posición muy homogénea" para "no aceptar otra medida por más que se ha intentado por parte de los británicos para devaluar todavía más el sistema de garantías en el ámbito europeo", explicó el ministro en rueda de prensa.
Fernández Bermejo lamentó que los intentos para generalizar en toda la UE unas garantías mínimas importantes en el ámbito de los procesos penales" se encuentre con "las dificultades para avanzar" que impone "una minoría de bloqueo a cuya cabeza aparecen el Reino Unido, Irlanda y otros países no muy por la labor por la existencia de tales garantías".
Recordó que la UE lleva tres años discutiendo avances en este ámbito y criticó que "el resultado es que hay que hacer un parón y que se puede conseguir fácilmente porque ahora somos 27 (Estados miembros)". Dirigiéndose a los periodistas dijo que "no hace falta que les explique que la dificultad de acuerdo ha aumentado".
A pesar de que ésta fue su primera asistencia a un Consejo de la UE como ministro de Justicia, Fernández Bermejo afirmó que "si venimos aquí es a construir Europa, al menos yo vengo a eso".
En este sentido, añadió que "España tiene claro que hay que avanzar sobre la idea de reconocimiento progresivo de resoluciones ajenas, a su vez construido sobre la existencia de una base de confianza recíproca". "Es la pescadilla que se muerde la cola y que permite que en la medida en que vamos avanzando en la existencia de legislaciones, tener más confianza en los sistemas del otro, eso es construir Europa", concluyó.
