UE.- La CE propondrá sanciones criminales para los responsables de vertidos tóxicos al mar

Actualizado: lunes, 23 octubre 2006 20:38

Narbona reclama que la UE lidere un plan para reforzar el control de tráfico de vertidos en todo el mundo

LUXEMBURGO, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea dijo hoy que trabaja para presentar en noviembre una propuesta de directiva que contemple "sanciones criminales" contra los responsables de vertidos de sustancias tóxicas al mar, tal y como ocurrió recientemente con la embarcación de bandera panameña 'Promo Koala' que, tras hacer escala en distintos puertos europeos, terminó descargando toneladas de vertidos en Costa de Marfil provocando ocho muertos y 85.000 intoxicados.

El Ejecutivo comunitario difundió hoy una declaración en la que apoyó todos los esfuerzos de los Estados miembros para tomar "todas las medidas necesarias para mejorar el cumplimiento de la legislación de la UE en transporte marítimo de basuras, incluido el establecimiento de sanciones criminales efectivas, proporcionadas y disuasivas".

Manifestó que "la UE necesita establecer unos niveles mínimos de sanciones criminales para ofensas medioambientales serias, incluido el tráfico ilegal de residuos", para lo que indicó que presentará una nueva propuesta legislativa "sobre la protección del medio ambiente por medio del derecho penal".

Ésta fue la contribución de la Comisión por lo que respecta al tráfico marítimo de residuos peligrosos en el Consejo de Medio Ambiente que este lunes se celebró en Luxemburgo y en el que los ministros europeos consensuaron la aportación de la UE de cara a la próxima reunión de la Convención Basel sobre este aspecto que tendrá lugar en Nairobi del 27 de noviembre al 1 de diciembre.

En el texto de conclusiones los Estados miembros confirmaron su apoyo a la enmienda de la Convención destinada a prohibir las exportaciones de vertidos tóxicos y alertaron de las "graves implicaciones que tiene el transporte marítimo de vertidos para los países en desarrollo".

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, celebró la intención de la Comisión de recurrir a la vía penal, una "orientación muy importante porque los delitos ecológicos tienden a trascender de las fronteras de los países", dijo en rueda de prensa.

Consideró, por tanto, que "la propuesta de la Comisión nos puede ayudar a evitar situaciones como la del Promo que pasó de Gibraltar a Algeciras, a Países Bajos y a Estonia, y crear un ámbito mucho mas potente de vigilancia y control con carácter preventivo a partir de la amenaza de responsabilidades penales".

REFORZAR LOS CONTROLES

Por otra parte, la ministra hizo adjuntar al acta de la discusión sobre la Convención de Basel un documento en el que la delegación española apostó por reforzar los controles del tráfico de vertidos a nivel internacional, pero en base a la legislación que ya existe en la UE a este respecto.

Reclamó así que la UE "lidere una propuesta internacional" para "equiparar el régimen jurídico de los responsables de los buques al de los productores y gestores de residuos peligrosos en tierra firme". Recordó que España "ha sufrido en propias carnes en varias ocasiones daños irreversibles por este tráfico incontrolado de residuos o sustancias peligrosas" y reclamó "una regulación mundial", pero que tome como referencia "los estándares de calidad ambiental exigidos por nuestra legislación".

Narbona estimó que los distintos instrumentos que existen actualmente "no abarcan ni resuelven todos los problemas del tráfico marítimo" y propuso una serie de "ideas de fondo" para mejorarlos.

Entre ellos, que los propietarios, fletadores y capitanes de buques de transporte de residuos, sobre todo si éstos son peligrosos, se hagan responsables de su correcta gestión medioambiental en todos los países de la ONU y en todos los puertos de atraque.

Asimismo, que éstos deban comunicar la llegada de los buques previamente a las autoridades de los puertos, junto a los datos de los residuos que transportan, la cantidad y su nivel de peligrosidad, de manera que los responsables portuarios puedan decidir dar o no permiso para atracar.

Narbona planteó también impulsar a toda la Organización Marítima Internacional (OMI) el sistema de la UE sobre seguimiento e información del tráfico marítimo de mercancías peligrosas y que cuando un buque cargado con ellas se encuentre en aguas internacionales esté obligado a informar a las autoridades marítimas de los países limítrofes.