UE.- Los socialistas europeos negociarán su apoyo a Barroso si éste asume un catálogo de 11 "propuestas reformistas"

Actualizado: lunes, 31 agosto 2009 12:32

Piden revisar la directiva de movimiento de trabajadores y garantizar los derechos sociales por encima de las libertades económicas

MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Socialista Europeo está dispuesto a negociar su apoyo al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, para que repita en su puesto otros cinco años, si éste asume de modo "firme y claro" una "agenda" de 11 "propuestas reformistas" que le presentará el portavoz socialista en la Eurocámara, Martin Schulz.

"No es fácil, pero el diálogo con él se va a iniciar en los próximos días y no descartamos que ese acuerdo pueda ser posible", adelantó en una entrevista con Europa Press el eurodiputado Ramón Jáuregui, que fue número dos en la candidatura del PSOE para las pasadas elecciones a la Eurocámara.

Entre las 11 propuestas destacan "un plan de relanzamiento de Europa", un Pacto Europeo por el Empleo, un Pacto de Progreso Social y una Carta de Derechos de las Mujeres, además de una nueva supervisión financiera, un presupuesto comunitario "a la medida de los desafíos" y, en conjunto, una nueva estrategia económica que reemplace a las actuales 'Estrategia de Lisboa' y ' Estrategia de Desarrollo sostenible'. Las peticiones están detalladas en una carta enviada por Schultz a sus compañeros de grupo.

El Grupo Socialista europeo se reunirá con Barroso el 9 de septiembre y "si ese marco de negociación prospera", Jáuregui no descartó que "haya un sí en el conjunto del Grupo Socialista". Así, la confirmación de Barroso se incluiría en el orden del día del pleno de la tercera semana de septiembre, a petición del Grupo Popular y el Grupo Socialista, incluso también del Grupo Liberal.

Barroso, ex primer ministro democristiano portugués, tiene asegurado el apoyo del PPE, grupo mayoritario en la Eurocámara y además, según recordó Jáuregui, "ha sido propuesto por unanimidad" por los 27 gobiernos de la UE, incluidos los que están en manos de la izquierda, como España, Portugal o Reino Unido.

Eso deja en una posición difícil a los eurodiputados socialistas de estos países. Jáuregui evitó precisar cuál será el voto de los españoles, pero dejó claro que no le gustaría que los socialistas europeos votaran divididos. "Que un conjunto de europarlamentarios de según qué países voten una cosa y otros otra... a mí me parece muy importante que los grupos empiecen a configurarse y a comportarse como europeos, superando las tentaciones de voto nacional", argumentó.

"UN RECHAZO TESTIMONIAL NO APORTA NADA"

Además, el eurodiputado español prefiere "que el Grupo Socialista dialogue con Barroso y le comprometa en una agenda reformista que pueda obtener el sí del grupo" antes que votar 'no', dado que no hay candidato alternativo. A su juicio, eso sería un "rechazo testimonialista que al Grupo Socialista no le aporta gran cosa".

Para Jáuregui, hay "muchas razones de política pragmática" que explican que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, respalde a Barroso, 'popular' y anfitrión de la 'foto de las Azores' que marcó el inicio de la guerra de Irak.

Concretamente, destacó que "los intereses del sur de Europa están muy representados" en su candidatura y, además, Durao Barroso es "portugués, un vecino" y "amigo de España". A ello se suma en que tras las elecciones el mapa del Parlamento Europeo es de mayoría conservadora, junto al hecho de que todos los Gobiernos de los 27 le apoyen, un consenso que puede exigir "ser respetuosos".

SCHULZ: PROEUROPEOS FRENTE A "XENÓFOBOS Y BEATOS"

Por su parte, Martin Schulz apunta otro motivo para que el Grupo Socialista apoye a Barroso sumando fuerzas con el PPE, y es que la próxima Comisión tenga el apoyo "de la mayoría de las fuerzas proeuropeas" en el Parlamento, y así demostrar que los europeístas son "muchos más que los antieuropeos, los xenófobos y los beatos", según dice en la carta a la que ha tenido acceso Europa Press.

Según Jáuregui, a los socialistas les gustaría que Barroso sea "firme y claro" a la hora de asumir la "agenda" socialista, empezando por "un plan de relanzamiento de Europa" que se base en "una coordinación reforzada de las políticas macroeconómicas y una "nueva política industrial destinada a crear y salvaguardar el empleo" con "inversiones más importantes y coordinadas en materia de empleo y de crecimiento verde".

En segundo lugar, reclaman un 'Pacto Europeo por el Empleo', acordado entre Gobierno, instituciones y agentes sociales, con acciones comunes para "salvar el empleo", crear más puestos de trabajo, "combatir el desempleo masivo", sobre todo el juvenil, reforzar los derechos de los trabajadores, "promover la igualdad salarial" y revisar la directiva sobre libertad de movimiento de los trabajadores.

DERECHOS DE LAS MUJERES

También reclaman una nueva 'Carta de los Derechos de las Mujeres' para "eliminar las barreras" en todos los los ámbitos y un 'Pacto de Progreso Social' "para decir claramente que ni las libertades económicas ni las reglas de la competencia tienen prioridad sobre los derechos sociales fundamentales, incluidos el derecho de huelga y el derecho de asociación".

Este 'Pacto', acompañado de una cláusula especial de "progreso social" en los Tratados, también debe servir para contrarrestar las "consecuencias sociales" de la crisis y "prevenir un aumento de la pobreza, de la desigualdad y de la exclusión".

En la misma línea, reclamarán una nueva "solidaridad mutua" entre los países para que puedan financiar conjuntamente las medidas del Pacto por el Empleo, y una "hoja de ruta" que garantice los sistemas de pensiones "duramente castigados por la crisis".

UN PRESUPUESTO A LA ALTURA DE LOS DESAFÍOS

En su carta, Schulz avanza también que pedirá a Barroso unas reglas y una supervisión "eficaces" de los mercados financieros, que cubra a todos los actores e instrumentos, junto a instrumentos financieros "más eficaces", incluyendo un "préstamo europeo"; un "nuevo marco legal para salvaguardar y aclarar el estatuto legal de los servicios públicos" y un presupuesto europeo "a la medida de los desafíos" que afronta la UE.

Por último, los socialistas piden una acción exterior, especialmente hacia Estados Unidos, para un 'new deal global' --para crear empleo, supervisar los mercados y ayudar a los países en desarrollo-- y una nueva "estrategia económica coherente" para avanzar hacia la economía del conocimiento sustituyendo la Estrategia de Lisboa y la de desarrollo sostenible.

RESPONDER A LA DECEPCIÓN CIUDADANA

Para Schulz, la cuestión central para dar su apoyo a un candidato será saber si éste "aporta una respuesta convincente a la decepción creciente de los ciudadanos de Europa ante el proyecto europeo" y da "una importancia nueva al mantenimiento del bienestar social y a la seguridad económica" de los ciudadanos.

A su juicio, "una recesión prolongada y la agravación del desempleo masivo" puede poner en peligro algunos de los grandes éxitos de la UE, sobre todo ahora que los partidos antieuropeos están explotando estos problemas --y han logrado una mayor presencia en la Eurocámara--.

"Las víctimas de la tragedia social, generada por un sector financiero irresponsable y funestamente reglamentado, deben ser la primera prioridad", sostiene Schulz, reclamando "una Europa con recursos ambiciosos", una "nueva Europa" que no nacerá "con una nivelación a la baja de las normas salariales, estatutarias y sociales".