Teme que se reproduzca el acoso en campaña y ve con preocupación la situación que puede crear la suspensión de ANV en los ayuntamientos
BILBAO, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó hoy que el Parlamento vasco debe actuar como lo hizo en 2003 el ex presidente de la Cámara, Juan María Atutxa, si se le ordena disolver Ezker Abertzalea, grupo parlamentario de EHAK.
En una entrevista concedida a Europa Press, Urkullu afirmó que son concientes de que más de la mitad de los parlamentarios podrían ser condenados por desobediencia, si finalmente se procede a la reforma del reglamento de la Cámara que defiende el tripartito, para que sea el pleno quien decida sobre la disolución de grupos, y éste resuelve no suspender a Ezker Abertzalea.
Tras manifestar que "es obvio" que la izquierda abertzale hace su vida política "marcada por las directrices del mundo de ETA", destacó que una de "las grandes preocupaciones" del PNV es "la situación caótica" que puede generar la suspensión de ANV en los ayuntamientos y expresó su temor de que se reproduzca "el acoso" por parte los ilegalizados a sus electos durante la campaña electoral.
Asimismo, defendió que el próximo Gobierno que salga elegido el 9 de marzo hable con ETA y preguntó por qué se puede dialogar con las guerrillas en latinoamérica y con quienes practican el terrorismo en Oriente Medio y no con la banda armada.
El líder 'peneuvista' afirmó que "por supuesto" que el Parlamento vasco deberá actuar como lo hizo Juan María Atutxa con Sozialista Abertzaleak, si se le ordena disolver al grupo de EHAK. En este sentido, precisó que no se trata de "una actuación de las personas, sino de una institución".
"Estamos hablando de una institución soberana, la máxima representativa de la voluntad de vascos. Y, cuando decimos que creemos en el Estado de Derecho y en la división de poderes, estamos recordando que el Poder Legislativo, como es el Parlamento vasco, es quien tiene capacidad para autorregularse y autoorganizarse", añadió.
Iñigo Urkullu defendió que se realice una reforma del reglamento de la Cámara, planteada por el tripartito, con el fin de que sea el Pleno y no la Mesa del Parlamento o la presidenta Izaskun Bilbao, quienes decidan sobre la disolución de grupos parlamentarios.
En este sentido, acusó al PSE-EE y al PP de pretender "esconder sus propias vergüenzas" al criticar esta iniciativa. "El problema es que una iniciativa de este tipo hace que todos los grupos se tengan que retratar en lo que es el reconocimiento de una institución soberana o, por el contrario, el reconocimiento de que el Parlamento es una institución de segunda categoría", señaló.
El máximo dirigente del PNV rechazó que, con esta proposición de Ley, se trate de "burlar a la Justicia" o intente salvar de la condena a Izaskun Bilbao, y preguntó "qué de malo hay en que los propios parlamentarios que han decidido un reglamento del Parlamento vasco vigente, sean quienes decidan".
"El planteamiento del PP y del PSE pretende disfrazar con la desobediencia a las sentencias judiciales sus propias vergüenzas, que son no reconocer que el Parlamento vasco es una institución soberana y de primera categoría", insistió.
LOS PARLAMENTARIOS, CONDENADOS
El presidente del EBB manifestó que son "conscientes" de que más de la mitad de los parlamentarios vascos podrían ser procesados y condenados por desobediencia por el Tribunal Supremo si se modifica el reglamento de la Cámara autonómica y se decide no disolver al grupo de EHAK. "Es la perversión de la intromisión judicial en el mundo de la política parlamentaria", dijo.
En este sentido, se preguntó "a quién se le hubiera pasado por la cabeza" que en democracia "representantes de la voluntad de la sociedad vasca" pudieran ser condenados "por defender lo que su propio reglamento indica y, no con voluntad de desobediencia a la Justicia, como se ha pretendido vender".
"¿A quién le cabe en la cabeza que una persona como el lehendakari y otros líderes políticos también vayan a estar en el banquillo de los acusados como consecuencia de la actuación de determinadas instancias de la Justicia absolutamente politizadas e ideologizadas?. Si esto ha sido posible, ¿por qué no lo va a ser que la mitad del Parlamento vasco esté condenado?", apuntó.
Tras reconocer que se crearía "una situación caótica", precisó que también se creará una situación de estas características si se ordena la disolución de los grupos de ANV en los ayuntamientos. "Esa es una de las grandes preocupaciones que tenemos en el PNV", explicó.
A su juicio, "las consecuencias de una ilegalización de ANV, gestionada de manera interesada por la propia ANV, como también por el PP, el PSOE y por las altas instancias de la Justicia, puede provocar situaciones muy complicadas para personas que viven a ras de suelo, en primera línea de la acción política, de la convivencia con sus ciudadanos, personas que tienen que soportar toda una presión, como hasta ahora se viene soportando, pero va a ser una situación muy delicada y de difícil gestión".
Además, expresó su temor de que en la próxima campaña electoral se reproduzca "el acoso" por parte de la izquierda abertzale a los candidatos del PNV, tal como ocurrió en los pasados comicios municipales y forales, visto "el acoso dialéctico" de ese mundo del que está siendo objeto su partido.
DIALOGO CON ETA
Iñigo Urkullu reiteró que el próximo Gobierno que salga de las urnas el 9-M debe debe hablar con ETA y preguntó por qué se puede dialogar con las guerrillas en Latinoamérica o con los que practican el terrorismo en Oriente Medio, y no se puede mantener contactos con la banda armada.
En este sentido, consideró "una incongruencia absoluta" con el Evangelio y "una intromisión" de las altas jerarquías de la Iglesia en la política, que los obispos hayan emplazado a los católicos a no votar a opciones que defienden el diálogo con terroristas, en alusión al PSOE.
"Quería diferenciar la Iglesia de las altas jerarquías de la Iglesia española", dijo, para precisar que "los obispos vascos viven más apegados a lo que es la realidad social de lo que parece que viven algunos obispos y cardenales españoles". "Creo que los obispos vascos guardan más prudentemente la diferenciación de lo que es la libertad de pensamiento de quien conforme la Iglesia con respecto a la política", aseguró.
Tras afirmar que entiende "el discurso del arrepentimiento", preguntó "dónde queda el discurso del perdón y la reconciliación". "Supongo que también el diálogo será una herramienta para provocar el arrepentimiento, el perdón, la reconciliación", apuntó.
"Siempre he defendido que hay que hablar con todo el mundo, incluso con ETA. Defendemos, desde la política del Estado español la necesidad de hablar con las guerrillas en Latinoamérica, Venezuela, Colombia, Bolivia, con quienes practican el terrorismo en Oriente Medio, se convocan conferencias internacionales de paz en el Estado y, sin embargo, ahora no se puede hablar con ETA", dijo.
Por último, señaló que "hay quienes, desde la estructura jerárquica de la Iglesia, está ideológicamente más vinculado a lo que son los postulados que defiende al PP".
