Urkullu dice que PSE actúa "desde el revanchismo" e insiste en que "detrás de la suma" con PP "no hay un proyecto"

Actualizado: domingo, 8 marzo 2009 12:40

Advierte de que un gobierno en minoría supondría "una desestabilización institucional"

BILBAO, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, acusa hoy al PSE-EE de actuar "mirando al pasado, desde el revanchismo" con la formación jeltzale, y afirma que "detrás de la suma PSE-PP no hay un proyecto", sino que para los socialistas "se trata del lehendakari y le da igual lo que pase después".

En sendas entrevistas publicadas hoy por los diarios El Correo y El País, asegura que "el PSE actual, en lugar de mirar al futuro, está mirando al pasado, desde el revanchismo con el PNV". "Para el PSE el 1-M fue un domingo fantasma" porque, según indica, "están haciendo una política después del domingo en base a lo que pensaban antes, a lo que tenían escrito en el guión".

El dirigente jeltzale precisa que, con sus críticas en las que aludía a que los socialistas pretenden dar un 'golpe institucional', "desde luego no pretendía hablar de golpe de Estado" ni de "ninguna imposición", sino dar "una imagen gráfica de que es sólo un 'quítate tú para ponerme yo'" y hacer ver que "detrás de la suma PSE-PP no hay un proyecto, que para el PSE sólo se trata del lehendakari y le da igual lo que pase después".

Urkullu recuerda que el PNV ganó las elecciones del pasado domingo e insiste en que su propósito "trasciende el tener lehendakari" ya que pretende "ofrecer a la sociedad vasca una estabilidad en el gobierno de las instituciones, empezando por el Ejecutivo vasco". En este sentido, cuestiona "cuál es el programa" del candidato socialista, Patxi López.

El presidente del PNV asegura que no se plantea la posibilidad de renunciar a la Lehendakaritza y afirma que si el PSE lo hizo en 1986, cuando los jeltzales "ganaron en votos", fue "porque no fueron capaces de hacer un Gobierno". El PNV, explica, ha obtenido "un resultado magnífico" y está "absolutamente tranquilos, conscientes de la situación pero queriendo que el electorado sepa el juego que se trae el PSE".

En esta línea, indica que su partido va a "seguir trabajando, desde la responsabilidad de ser el partido más votado, para que el que no lo ha sido no consiga lo que no le corresponde". "Y si lo hace, que el PP nos explique si apoya al PSE para vender en España que ya se han quitado de encima a los bárbaros del norte o si hay un modelo de país convenido entre PP y PSOE", añade.

En esta línea, señala que PSOE y PP "dan muchos pasos juntos en la misma dirección, creo que pensando en cambiar el actual modelo de Estado" y considera que "podemos poner nombres catalanes o vascos a quienes gobiernan en Cataluña o Euskadi, pero el centro de decisión está en Madrid".

DESESTABILIZACIÓN INSTITUCIONAL

Por otra parte, destaca que el PSE debería explicar, además de "qué proyecto comparte con el PP aun no gobernando en coalición", si es "suficiente un gobierno en solitario ante la situación que vive la sociedad vasca, ante lo que es la configuración institucional de la sociedad vasca". "Incógnita supina", afirma.

En este sentido, considera "una desestabilización institucional el hecho de que se pretenda gobernar en minoría" y agrega que el PSE no puede pretender, en caso de que finalmente dirija el Ejecutivo vasco, que "el PNV deje de hacer su política en las otras instituciones". No obstante, precisa que, "cuando hablo de desestabilización no digo que el PNV vaya a ir a la contra, queremos trabajar en positivo", pero "seguiremos haciendo nuestra política, no la que le convenga al partido en el Gobierno".

De este modo, alude ese caso a la posibilidad de "chocar con la política del PSE" porque "la presencia de cada uno en cada institución no vendrá dada por un acuerdo, sino por una agresión".

Urkullu asegura que el PNV "no está puenteando al PSE para nada". "Otra cosa es que el PSOE haga su propia lectura y tenga su propia estrategia. Probablemente quiera utilizar al PSE para tapar el fracaso de Galicia y no le quede más remedio que dar por bueno su planteamiento", apunta.

Asimismo, considera "una arrogancia" las últimas manifestaciones desde el Gobierno central y el PSOE en las que "alguien que no ha ganado las elecciones nos perdone la vida y nos dé consejos de cómo tenemos que actuar en política".

El presidente del PNV, que afirma que "el objetivo del soberanismo es irrenunciable", indica que "la transversalidad es un concepto tan manido y desvirtuado que es casi como hablar de algo que ha perdido su valor". "El PNV siempre ha practicado una política de acuerdo entre diferentes, por mucho que se diga lo contrario", señala Urkullu, que recuerda que "la apuesta por el fin de la política de bloques y por una nueva etapa de acuerdo entre diferentes está en la ponencia de la asamblea de 2007" del PNV.

Por otra parte, opina que, si PNV y EA hubiesen concurrido en coalición a las elecciones, "quizás no estaríamos en esta situación" y añade, en este sentido, que "el perjuicio que ha sufrido EA también lo ha padecido la hipotética coalición, y en todo caso el voto nacionalista".