LOS SANTOS DE MAIMONA (BADAJOZ),
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, reiteró hoy en la localidad pacense de Los Santos de Maimona la necesidad de que todos los extremeños acudan a las urnas el próximo 9 de marzo para apoyar políticas que les beneficien.
Para ello, pidió a los presentes en su primera visita a la localidad desde que accedió a la presidencia autonómica que difundiesen su mensaje allá donde fueran.
"La política no es neutra", dijo, "no da igual quien gobierne, porque la política no es sólo hacer cosas sino por qué se hacen", explicó en su intervención en la que además se refirió a los logros de Zapatero en esta legislatura y su repercusión para los extremeños. Fernández Vara se fijó especialmente en la subida de las pensiones mínimas. "Aquí hay muchas pensiones mínimas, no olvidemos nunca que hubo un momento de la historia de esta tierra en que la gente trabajaba sin que nadie cotizase por ella", dijo.
En ese sentido, el presidente de la Junta incidió en materia económica en la próxima negociación del Modelo de Financiación de las Autonomías y expresó que prefiere "negociarlo con Solbes que con Pizarro" al que dijo que "cuando venga a Extremadura habrá que exigirle que pida disculpas", en referencia a su manifestaciones sobre las comunidades extremeña y andaluza.
Fernández Vara se mostró convencido de la necesidad de alcanzar una mayoría absoluta en las urnas "porque nos jugamos mucho" y defendió el patrimonio del Partido Socialista, que se basa "en las ideas".
En cuanto a políticas de cooperación e inmigración, se refirió a Extremadura como una región que "no siendo de las más ricas de España es capaz de compartir y los extremeños están orgullosos de ser extremeños allá donde van". Y se mostró contrario a la propuesta del PP de "hacer firmar un documento a los inmigrantes para que se adapten a nuestras costumbres, a nuestra religión, en un país aconfesional".
De los populares dijo que "han hablado con el higadillo en muchos momentos de la legislatura que ha sido muy dura, y ahora piden el voto con cabeza y corazón, no se puede obligar a nadie a sentirse tan españoles como nosotros, que cada uno se sienta lo español que quiera pero que eso no le dé más derechos", decía Vara que en sus últimos minutos de intervención recordaba que "tras la tempestad viene la calma" y que "España no se ha roto, las familias no se han roto", sino que al final queda "la libertad, la democracia, el progreso".
