Varios presos de confianza conocidos en la cárcel como ordenanzas se turnan para controlar al presunto pederasta

Actualizado: viernes, 3 julio 2015 12:31

MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

Son varios los presos que ayudan a los funcionarios de la prisión de Soto del Real a controlar y servir de apoyo al presunto pederasta Antonio Ortiz, sometido a un seguimiento especial desde que ingresó en el centro. Son los conocidos en prisión como ordenanzas, un destino dentro de los muchos en los que pueden trabajar los internos pero al que sólo acceden los que son de la entera confianza de los funcionarios, informan a Europa Press fuentes conocedoras de la situación.

Estas fuentes eluden dar datos concretos de quiénes integran este grupo de ordenanzas porque, según dicen, son casi más próximos a los funcionarios que a los presos y les podría perjudicar, pero afirman que todos ellos son españoles y que se turnan en el acompañamiento de Antonio Ortiz para poder seguir haciendo sus labores en el módulo de Enfermería como repartir el desayuno, la comida, limpiar las consultas médicas o las zonas comunes.

Aseguran que Antonio Ortiz no sale al patio del módulo, pero por voluntad propia y que en el módulo cuenta con un gimnasio terapéutico de pequeño tamaño, aunque ha manifestado a los funcionarios que es insuficientes para él. El gimnasio está en la planta baja a lado de las consultas del módulo de Enfermería, único edificio distinto al resto de los módulos de Soto del Real.

En ese lugar en el que el presunto pederasta hace vida desde su detención hay consultas equipadas de varias especialidades como odontología, ginecología, sala de curas. En la planta baja también hay una habitación de visión directa.

Gracias a que esa celda cuenta con un gran ventanal acristalado, el funcionario puede controlar en todo momento al preso. En la misma planta baja del módulo están los despachos de los médicos, la oficina de Farmacia o el archivo médico.

Ya en las dos plantas superiores hay habitaciones que en este caso pueden ser de varias camas. También hay una zona de aislamiento para presos en primer grado (aislamiento) y otra de aislamiento clínico en caso de que haya que ingresar a algún preso con una enfermedad contagiosa. En todo el módulo de Enfermería hay cerca de 60 camas.