MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa, ha acogido positivamente la propuesta realizada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, de estudiar que agosto sea un mes procesalmente hábil para los tribunales.
En declaraciones a Europa Press, el vicepresidente del órgano de gobierno de los jueces ha apostado por "cambiar" los "conceptos tradicionales" y aprovechar los recursos disponibles para abrir la posibilidad de celebrar juicios en el mes de agosto. "La agilización de la Justicia exige un esfuerzo de todos", ha añadido.
De Rosa ha abogado por optimizar "al máximo" los recursos disponibles en la Administración de Justicia en el momento "tan crítico de crisis". A su entender, los tribunales deben estar en agosto abiertos a todos los ciudadanos, tal y como ocurre en los servicios sanitarios o la Administración Tributaria.
En todo caso, ha apuntado que esta medida afectaría al ámbito civil y social al recordar que el mes de agosto resulta hábil en la jurisdicción penal. "A mi me parece perfecto. Yo creo que puede ser tenido en cuenta por los profesionales y el Poder Judicial para que todos los días puedan celebrarse juicios de todo tipo", ha añadido.
Desde su punto de vista, la agilización de la Justicia no puede sustentarse sólo en el aumento de recursos económicos, por ello son adecuadas otras propuestas como es la posibilidad de celebrar también juicios en horario de tarde.
PROCESO "COMPLEJO"
Otros miembros del CGPJ, consultados por Europa Press, han considerado "muy genérica" la propuesta de Ruiz-Gallardón y han preferido esperar a que el responsable de Justicia concrete más esta medida.
En principio, han dado la bienvenida a toda actuación destinada a agilizar la Justicia aunque también han puesto de manifiesto la "complejidad" de articular la habilitación del mes de agosto.
Según ha señalado el nuevo ministro de Justicia durante su intervención en la toma de posesión de altos cargos de su departamento, deben "modificarse costumbres que no son compatibles con una cultura competitiva", como es la inhabilitación procesal del mes de agosto "que tenía sentido por razones históricas" y que es algo que hay que revisar para avanzar en la agilización de los procedimientos.
