Tutor, contento por lo "fácil" que resultaba conseguir fondos públicos, pidió "andar al loro" y "vigilar todas las subvenciones" de la Xunta
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Xunta resolvió en marzo de 2013, seis meses después de que trascendiese la Operación Pokémon con las primeras detenciones en Galicia, revocar la segunda anualidad de la subvención concedida a Sermasa --filial de Vendex-- para "incentivar el turismo de aventura y actividades de ocio y tiempo libre" y de la que el delegado del grupo, José María Tutor, se valió inicialmente para comprar un barco.
Incluida en el sumario de la causa, al que ha tenido acceso Europa Press, la resolución de revocación está firmada por la responsable de Turismo, Nava Castro, y alega para revocar la segunda anualidad, que ascendía a 9.886,05 euros, que la empresa "no justificó en tiempo y forma" la inversión subvencionable conforme exigía la convocatoria.
"No es objeto subvencionable la implantación del sistema de calidad. No se considera subvencionable el importe de la furgoneta y el pequeño material por no enviar tres presupuestos según lo requerido", recoge en "observaciones" el acta de resolución de la revocación.
La concesión de la ayuda a Sermasa, que empleaba la marca Nauga, con domicilio en A Coruña, como división del mar, se había autorizado en diciembre de 2011. La ayuda concedida ascendía a un total de 19.772,20 euros en dos anualidades --9.886,05 en 2011 y la misma cantidad en 2012-- para un total de inversión subvencionable de 79.088,40 euros (39.544,20 en 2011 y otro tanto en 2012).
El informe del Servicio de Vigilancia Aduanera cuenta revela como Tutor se confabuló con otro grupo de personas ligadas con para "obtener" la ayuda de la Xunta para la compra de una embarcación. Para ello, el 7 de julio de 2011 solicitaron la inscripción en el registro de empresas y actividades turísticas de Sermasa-Nauga.
Incluso antes de recibir el dictamen favorable de la inscripción de la empresa en el registro, presentaron la solicitud de ayuda para el proyecto de "turismo de aventura". La Xunta requiere documentación para completar el expediente, incluidos los presupuestos de tres proveedores que, según las conclusiones de Aduanas, son manipulados.
En diciembre del mismo año, la Xunta notifica la resolución definitiva conforme se concede la subvención solicitada por importe de 9.886,05 euros para 2011 y la misma cantidad para una segunda anualidad en 2012. Turismo apremia para que presenten la documentación y se justifica un gasto de 40.100 euros mediante una factura con la firma portuguesa Estaleiros do Norte.
El concepto de dicha factura es una embarcación modelo Astec 800 y un motor Mercury F300XL sin número de serie y justificante de transferencia de la cantidad indicada a dicha empresa.
OBTENCIÓN "FRAUDULENTA"
Sin embargo, en agosto de 2012, Aduanas relata que presentan en la Capitanía Marítima de A Coruña la solicitud de inscripción de la embarcación modelo Vigilant & Dining VD PRO-800 y motor modelo Mercury F300X1, aportando como documentación necesaria la factura de Estaleiros do Norte en concepto de una embarcación Astec 800 completa por 20.000 euros con el mismo número de serie que la presentada en la Xunta y la factura del motor Mercury FX300XL por 18.408 euros.
Aduanas constata así que "no se corresponde" la factura presentada para la concesión de la subvención con la registrada ante Capitanía Marítima para la inscripción de la embarcación, obteniendo presuntamente de Estaleiros do Norte "la devolución de 15.000 euros y la compra de otrs dos barcos más pequeños por importe total de 25.000".
De este modo, el informe concluye que Tutor, Guillermo José Ferreiro Torres, Manuel San Martín Dopazo y Estrella Roca Naveira se pusieron de acuerdo para "la obtención fraudulenta" de una subvención por la compra de una embarcación "en combinación con la empresa portuguesa Estaleiros do Norte.
Para ello habrían utilizado presupuestos y facturas, facilitados por dicha empresa, que "no se correspondían con la realidad de los gastos efectuados". También se apunta a supuesto "blanqueo de capitales" haciendo constar gastos por parte de Nauga "sin llevarlos a efecto", registrándolos como contabilidad de dicha empresa.
El informe somete, por último, "a consideración" del juzgado la remisión a la Xunta de las actuaciones expuestas en el informe por "si interesara para la recuperación de la cantidad entregada como primer plazo de la subvención".
"ESTAR AL LORO"
Los pinchazos telefónicos realizados en el marco de la Pokémon evidencian que José María Tutor, imputado en la causa, estaba muy pendiente de la evolución de esta ayuda y que celebró con Manuel San Martín Dopazo, empleado del acuario coruñés, cuando la Xunta autorizó su concesión.
El informe de los funcionarios de Aduanas revela que ambos hablaron por teléfono sobre "lo fácil" que había sido conseguir esta ayuda y que parecía que en la Xunta estaban "tirando" el dinero.
De hecho, en esa coyuntura, el delegado de Vendex en Galicia advirtió de la necesidad de "estar al loro" y de vigilar "todas las subvenciones". Tutor llega a señalar, según Aduanas, que hay que "revisar todos los días el DOG (Diario Oficial de Galicia)" porque ya se vio "lo poco que costó conseguir" los 20.000 euros que les dieron y de los que la Xunta, finalmente, revocó la segunda anualidad.
