Zapatero admite que hubo "excesos" en la campaña, pero dice que no son "generalizables" y ve las críticas "exageradas"

Actualizado: miércoles, 10 junio 2009 10:00

Durán asegura que ha sido "la peor campaña" desde 1977 y aprovecha para pedir listas abiertas y el fin de la circunscripción única

MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció hoy que en la pasada campaña electoral se han producido "exageraciones" y "excesos" pero subrayó que en ningún caso son "generalizables" y pidió a los responsables políticos "responsabilidad" de manera que no creen "desafección" a los ciudadanos con sus críticas.

El jefe del Ejecutivo respondió así en la sesión de control al Gobierno al portavoz de CiU, José Antonio Duran, quien denunció que la campaña para las elecciones al Parlamento europeo ha sido "deplorable" y "la peor que se ha hecho" desde 1977 y responsabilizó de ello a "los dos grandes partidos".

En concreto, Duran denunció que, "con las acusaciones, a veces con frivolidad, aireando temas de estado y temas de seguridad, de unos y de otros" no se hace ningún bien a la democracia ni a "la confianza de los ciudadanos respecto de la política".

Zapatero reconoció que en las últimas semanas ha habido "una actitud de cierta crítica" hacia las campañas electorales "incluso por los propios protagonistas" de las mismas, pero rechazó "entrar en ese juego". "Tengo un gran respeto por la tarea de lo público, por la tarea de los partidos políticos", afirmó.

El jefe del Ejecutivo subrayó que él procuró "hacer una campaña de explicación de Europa" y recalcó que todos los representantes políticos deben "contribuir a intentar mejorar el debate público y mejorar las campañas". Por ello, sostuvo que los dirigentes públicos no deben "procurar desafección o desinterés hacia la actividad pública y política". "Los primeros que tenemos que respetarla somos los que las protagonizamos", recalcó.

LA CAMPAÑA QUE MÁS "FRUSTACIONES" HA GENERADO

Durán reiteró que esta campaña electoral "ha generado más frustraciones que ninguna otra" y defendió que la necesidad de "regeneración de la vida política" y del "lenguaje, los contenidos y las acciones de los partidos" continúa siendo "una asignatura pendiente en España".

Sin embargo, el presidente del Gobierno rechazó, por "poco conveniente y constructivo", responsabilizar a los partidos políticos "de una campaña que se ha calificado en términos exagerados".

"Es verdad que ha habido exageraciones, notables", reconoció Zapatero, para después poner como ejemplo las palabras del cabeza de lista de la coalición de CiU a las europeas, Ramón Tremosa, quien, con motivo de la visita del presidente a Barcelona, dijo que "iba como Franco". "Sí ha habido excesos", remachó el jefe del Ejecutivo.

En cualquier caso, dijo que estos hechos "no son generalizables" y, aunque en una campaña siempre "habrá declaraciones desafortunadas", insistió en que los partidos deben "defender el valor de la participación política y de la democracia".

Por otra parte, Durán también aprovechó su intervención para criticar la circunscripción electoral única, que, dijo, "provoca una separación entre ciudadanos y candidatos". Además, reprochó al cabeza de lista de los socialistas en estos comicios, Juan Fernando López Aguilar, que no visitara Cataluña en campaña y aseguró que aunque el del PP, Jaime Mayor Oreja, lo hizo una vez "seguro que no lo hará en los próximos años".

"No hay ningún país en Europa, incluida la jacobina Francia, que no divida los territorios en circunscripciones electorales más próximas a los ciudadanos", insistió el diputado catalán, para después instar a Zapatero a abordar "un cambio" en el sistema electoral que "permita acabar con las listas cerradas y una mayor proximidad a los ciudadanos".