Zapatero asegura que España intentará mantener sus 54 eurodiputados cuando entre Croacia en la UE en 2014

Actualizado: jueves, 18 diciembre 2008 14:57

Rajoy apoya el retorno al Tratado de Lisboa y los grupos minoritarios critican la "Europa a la carta"

MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy que el Ejecutivo intentará mantener los 54 eurodiputados que fija el Tratado de Lisboa para España después de la entrada de Croacia en la UE en 2014, que, reconoció, podría afectar a la composición de la Eurocámara.

Zapatero respondía así en su turno de réplica en el Pleno del Congreso para explicar las conclusiones del último Consejo Europeo, tras ser preguntado por el portavoz adjunto de CiU en la Cámara Baja, Pere Macías, acerca de las acciones del Gobierno para mantener en 2014 los cuatro europarlamentarios de más que recuperará España si entra en vigor el Tratado de Lisboa.

"Trabajaremos de cara a 2014 para mantener esos cuatro escaños", aseguró el jefe del Ejecutivo, que, no obstante, reconoció que la entrada de Croacia "repercutirá" en el reparto de escaños. "Habrá que buscar una solución, pero el Gobierno defenderá mantenerlos", aseguró.

La Eurocámara se renovará el próximo 7 de junio y España elegirá a 50 eurodiputados, conforme al vigente Tratado de Niza pero, si finalmente entre en vigor el Tratado de Lisboa --Irlanda se ha comprometido a volver a someterlo a referéndum-- volverá a haber 54 diputados.

Zapatero insistió en que ese aumento de escaños se hará en 2010 y consideró "probable" que ello coincida con la ratificación del Tratado de Adhesión de Croacia.

En el pasado Consejo Europeo, el presidente de turno de la UE, Nicolas Sarkozy, afirmó que tanto las "garantías" que se darán a Irlanda para que vuelva a intentar ratificar el Tratado como el aumento de eurodiputados para España y otros países se introducirán como anexo al Tratado de Adhesión de Croacia "en 2010 o 2011".

El presidente del Gobierno no precisó hoy cómo afectará la entrada en vigor del Tratado de Lisboa a la Presidencia española de la UE, que tendrá lugar en el primer semestre de 2010, dado que Lisboa prevé la creación de una presidencia permanente del Consejo Europeo y del Consejo de Asuntos Exteriores. Sólo alabó la "decisión acertada" del Consejo de permitir "facultades excepcionales" para que "los países puedan articular medidas adecuadas".

Ante las quejas de algunos portavoces parlamentarios, Zapatero reconoció que el Tratado de Lisboa puede no ser "el mejor acuerdo posible" para que Irlanda vuelva a retomar la ratificación de la Carta Magna europea o que "algunas garantías jurídicas" marcadas para la armonización fiscal "pueden no ser el mejor camino, pero subrayó que Europa es "una democracia y es lo que se ha aprobado por unanimidad".

"SOMBRAS Y LUCES"

Además, respondió a las críticas de algunos diputados sobre el proceso de construcción europea, y aseguró que "cuando se avanza, aunque sea a un ritmo prudente, produce satisfacción". Así, aseguró que la historia europea es "de avances y parones", pero de "historia positiva" en cualquier caso.

En su intervención previa, el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, aseguró que ha habido "más sombras que luces" en la respuesta de la UE ante la crisis --en su opinión, insuficiente-- y ante el 'no' de Irlanda al Tratado de Lisboa.

Llamazares expresó el convencimiento de su formación de la conveniencia de sustituir la "Europa a la carta" por un "verdadero proyecto constituyente" con orientación "confederal". Criticó además que se someta "a un tercer grado" a Irlanda, que hace sólo seis meses rechazó el Tratado de Lisboa en referéndum, para que vuelvan a votar "hasta que digan lo políticamente correcto".

LLAMAZARES SIEMPRE VE "MÁS SOMBRAS"

Zapatero criticó que Llamazares "siempre" vea "más sombras que luces" y apuntó que a lo mejor es algo que va "en el ADN de su formación política".

Las críticas al proceso de ratificación del Tratado de Lisboa también llegaron desde otras formaciones políticas, como el BNG, cuyo portavoz, Francisco Jorquera, sostuvo que la repetición del referéndum en Irlanda "hasta conseguir la ratificación" es "remover la voluntad democrática ya expresada por un pueblo".

Del mismo modo, la portavoz de Na-Bai, Uxue Barkos, también criticó la "Europa a la carta" en que se ha convertido la UE, en su opinión, tal y como ha quedado de manifiesto en el proceso de ratificación del Tratado.

APOYO CRÍTICO DE RAJOY

Por su parte, el líder del PP, Mariano Rajoy, expresó en su primera intervención su "preocupación" porque, en aras de resolver la "crisis institucional provocada por el 'no' de Irlanda", se haya "accedido a las exigencias " de este país, especialmente en lo que se refiere al mantenimiento de un comisario por país.

En opinión del presidente de los 'populares', "no es un buen procedimiento el que un país cuya población no llega al 1% de la de la Unión condicione de esa forma un aspecto clave de su gobernanza", pero optó por "dar por bueno este compromiso" y expresó su esperanza en que "no perjudique la eficacia futura de la Comisión". "Espero que este acuerdo permita al menos llevar a buen puerto el Tratado de Lisboa que, aun con estos recortes, es mejor que la parálisis institucional en la que nos encontrábamos", afirmó.