Afirma que puede "durar años", advierte contra la confrontación y proclama que ningún gobierno ha respetado más el Poder Judicial
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MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró esta noche que "quizás" se esté "en la fase final" del terrorismo, "sin decir cuánto durará y cuánto representa de dificultad". "Pueden ser años, no sabemos cuantos", añadió el jefe del Ejecutivo.
Zapatero se pronunció así durante un coloquio con el juez Baltasar Garzón en la Casa de América y a propósito de las razones por las que en, materia de terrorismo no se llega a un consenso con las fuerzas políticas, en alusión al PP.
Zapatero expuso en primer lugar que hay "dos factores" que condicionan "sobre lo que podría ser un disenso en estos momentos bastante fuerte". El primero, indicó, es que "quizá estemos, y es algo en lo que coinciden los análisis, la lógica, de lo que representa que la democracia ha hecho, en la fase final, sin decir cuánto durará y cuánto representará de dificultad".
EVITAR LA "CONFRONTACIÓN" Y AUTOCRÍTICA.
A su juicio, "cuando esa fase final se advierte, suele pasar que el debate se intensifica". "Lo deseable es que, sin negar el debate, que entiendo que exista, sin negar el diálogo, evitáramos la confrontación mayor, grave, que es lo que en algunos momentos podemos vivir en nuestro país".
Para el presidente, esto es un error "para todos", para quien "lo alimenta" y desde luego "para acercar el final de la violencia". Zapatero señaló que al final los ciudadanos marcarán el camino e "impondrán su ley". "En última instancia, la ley tiene su fuente poderosa en la propia ciudadanía", añadió.
La segunda razón para este "disenso" la centró en la situación política española que se vive, dijo, desde las elecciones generales. Así, explicó que todos los proyectos políticos que han tenido un tiempo en el Gobierno --e incluyó la anterior etapa socialista--, tienen un periodo "de asumir y hacer la autocrítica oportuna" de por qué los ciudadanos retiran la confianza.
Ese tiempo, indicó, suele ser largo. "En la medida que un partido asuma en menor tiempo posible su derrota y autocrítica los ciudadanos le ayudarán en el futuro más rápidamente", advirtió Zapatero, que, refiriéndose "a todos", apeló a darse cuenta de que se pierde "no por culpa de los ciudadanos", sino de los partidos.
"Me refiero a la derrota en 1996 igual que a la derrota del PP en 2004", afirmó. "Cuando uno pierde, la culpa o el mérito es de uno --remarcó--. Los ciudadanos, el día que votan, aciertan siempre".
LA DEMOCRACIA "IMPOSIBILITA" LA SECESIÓN.
En su reflexión sobre el terrorismo, también en Iberoamérica, Zapatero destacó que la violencia "es la negación de la palabra". "Nada detesto más que la violencia", proclamó Zapatero, que indicó que es "absolutamente inútil en democracia" y que "no hay democracia que ceda a la violencia".
Recordó que hace un año hubo "un debate" sobre "el futuro de España y la unidad" y señaló que "no hay un país democrático que conozca un problema de secesión". "La democracia lo imposibilita, no hay un sólo ejemplo", enfatizó, remarcando que los países sólo han tenido problemas de unidad cuando han salido de dictaduras o de procesos de inestabilidad.
"Pero la democracia siempre gana a la violencia, garantiza la unidad de un país y lo que queda como pregunta es hasta qué punto o cuánto tiempo los violentos permanecerán en el fanatismo criminal sabiendo que nunca ganarán y sabiendo que lo único que pueden producir es dolor", señaló.
A su juicio, el terrorismo, que está "presente en toda la historia", es una "de las grandes asignaturas que la democracia vencerá". "La democracia impondrá el fin de la violencia", resaltó.
SIN ORIENTACIONES A JUECES.
El presidente del Gobierno defendió que en España el Poder Judicial no se deja presionar por el poder político "bajo ningún concepto". Lo definió "como serio e independiente y al que hay que respetar por encima de todo".
Garzón le interrogó entonces sobre por qué se dice que el Ejecutivo presiona a jueces. "Eso es cuando faltan argumentos políticos", enfatizó Zapatero, que destacó que los jueces y los tribunales "no son presionables". "Como presidente del Gobierno, debo subrayar que es imprescindible para una buena democracia respetar la independencia del Poder Judicial --indicó--. Desde luego los actores políticos sobre todo tenemos que respetar, y en primer lugar el Gobierno, debe ser escrupulosamente respetuoso".
Declaró que él "ha procurado serlo siempre", tanto en su etapa en la oposición como en la de presidente. Así, dijo que es imposible encontrar una declaración suya en la que valore una actuación judicial. "Pero no porque le interese al Gobierno, es que le interesa a la democracia", indicó.
"Sería difícil que encontrara un sólo juez al que me haya podido dirigir en alguna ocasión para trasmitirle una orientación, es radicalmente imposible", dijo Zapatero, que a renglón seguido proclamó que "no ha habido" otros Gobiernos con "más respeto al Poder Judicial" que el Ejecutivo que preside.
"Igual puede ser, pero más, no, y hemos tenido decisiones judiciales de todo tipo", añadió. En este sentido, agregó que es fundamental que la Justicia sea independiente y que no se mire "con ningún color" porque el único es "la Ley".
DEFENSA DEL "DIÁLOGO".
El presidente se permitió una broma con el juez Baltasar Garzón, quien le interrogó durante el coloquio, a propósito del título de las jornadas en las que estaba participando: 'Diálogos sobre Derechos Humanos y Seguridad Jurídica en Iberoamérica'. Zapatero indicó que la palabra "diálogo" es una palabra "sorprendetemente puesta en cuestión en un espacio democrático, como es España".
"Cuando veía hacia aquí y veía que el programa era 'diálogos' venía con cierta satisfacción, porque parece que el diálogo produce cierta alergia cuando es en definitiva la esencia de todo lo que significa nuestro modelo de convivencia y democrático", señaló.
En otro punto, y ya en clara referencia al PP, Zapatero aseguró que durante su etapa de oposición promovió varios acuerdos con el PP, citando el Acuerdo por las Libertades y el Pacto por la Justicia. Señaló que no se firmó el de la inmigración porque se acababa de firmar el antiterrorista y al Ejecutivo del PP "le parecieron demasiados".
A su juicio, dónde se ve "quién es dialogante" es desde la oposición, porque al que está en el Gobierno siempre le vienen bien los acuerdos. "Los ciudadanos no valorarán bien a quienes no quieran facilitar acuerdos, diálogos y consensos", remarcó.
MINISTERIO FISCAL: MÁS FUERZA Y MÁS PODER.
De otra parte, y en cuanto a la autonomía del Ministerio Fiscal, Zapatero aseguró el nuevo marco elaborado por su Gobierno para el Ministerio público avanza en la "autonomía y en la indepencia". Señaló que el papel de la Fiscalía debe avanzar en la línea de "cobrar más fuerza y más poder" y a la vez, "más autonomía".
"Una de las claves de una Justicia independiente, de una buena aplicación de la Ley, depende de una Fiscalía con buenos instrumentos, con una legislación más avanzada", dijo, apostando por tener "una poderosa Fiscalía". "Esto es fortalecer el Estado", finalizó.
