Zapatero critica que Rajoy le acuse de apoyar la guerra de Irak y que él y Aznar deberían pedir perdón

Actualizado: martes, 4 marzo 2008 23:16

Acusa al PP de hipocresía por hacer oposición con la lucha contra ETA y defiende Educación para la Ciudadanía

CIUDAD REAL, 4 Mar. (de la enviada especial de EUROPA PRESS Carolina Jiménez) -

El presidente del Gobierno y candidato socialista a la reelección, José Luis Rodríguez Zapatero, recuperó hoy la guerra de Irak después del cruce de acusaciones que protagonizó ayer con el candidato del PP Mariano Rajoy, para decir que "es inconcebible" que éste le acusara de apoyar la guerra de Irak y para afirmar que Rajoy y el ex presidente José María Aznar deberían pedir perdón a los españoles.

Zapatero menciona con frecuencia su compromiso de retirar las tropas de Irak pero hoy fue más allá al afirmar: "Me siento muy orgulloso de haber atendido la voluntad del pueblo español y de haber sacado las tropas de una guerra ilegal que sólo ha servido para promover más terrorismo internacional, más injusticia en el mundo". "Y me siento triste porque aún el PP, Aznar y Rajoy no hayan pedido disculpas a los españoles por llevarlos a aquella guerra ilegal", manifestó Zapatero ante más de 7.000 personas en el pabellón Don Quijote Arena de Ciudad Real.

Frente a un público que le gritaba "¡guapo¡" y le pedía que hablara "de la niña de Rajoy", Zapatero arremetió contra los 'populares' que "no se alegran de nada, están todo el día tristes, amargados y sólo quieren descalificar, insultar". "Una derecha que con tal de criticarme y con tal de confrontar en el Gobierno llega al limite de lo inconcebible, y lo inconcebible ahora es que yo apoyé la guerra de Irak", remachó.

En todo el mitin, Zapatero sólo se refirió en otra ocasión al 'cara a cara' de anoche, y fue para decir que "lo importante no es quién gane los debates", sino que "haya debates, que hace 15 años que, porque el PP no quería, no había". "¡Vaya paliza que le diste!", gritó alguien entre el público.

El líder socialista volvió, además, a acusar al PP de "hipocresía" por preocuparse sólo ahora de los trabajadores, por criticar la política exterior y por denigrar a los profesores, de los que Zapatero declaró sentirse "orgulloso".

"En estos cuatro años hemos vivido la oposición que ha hecho el periodo de más crispación y más hipocresía de todo el periodo democrático frente a la actitud del Gobierno", manifestó Zapatero, que volvió a criticar al PP por no apoyar al Gobierno contra el terrorismo.

HIPOCRESIA EN LA LUCHA CONTRA ETA

"Hipocresía es hacer oposición al Gobierno en la lucha antiterrorista y lealtad es estar con el gobierno en la lucha contra ETA, por el fin de ETA, para acabar con ETA", añadió.

Por ello, afirmó que el día 9 "lo que tiene que cambiar es la oposición" y pidió un voto mayoritario para formar "un gobierno con serenidad, un gobierno con firmeza, con sensibilidad".

"Pido a los españoles un voto mayoritario para dejar atrás la estéril crispación, los enfrentamientos inútiles, pido un voto mayoritario para que en esta nueva etapa hagamos eso que más deseamos, compartir España y compartir el futuro", añadió.

Zapatero estuvo acompañado por el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda; la cabeza de lista al Congreso por la provincia, Clementina Díez de Baldeón y el número dos y secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda.

El mitin se vio interrumpido por una veintena de funcionarios de Justicia en huelga, abucheados por el público mientras Zapatero afirmaba que "todo el mundo tiene libertad de expresión", y perturbado también por simpatizantes socialistas que no pudieron entrar en el recinto y se dedicaron a golpear las puertas durante buena parte del acto.

DISCURSO PARA TRABAJADORES

Zapatero recuperó su discurso de confianza sobre la economía --"hemos crecido, ahorrado y repartido"-- se comprometió a fomentar la igualdad entre hombres y mujeres, a mejorar las políticas sociales, el salario mínimo, agradeció y a estar siempre "al lado de los que no tienen de todo", "de los que saben ganarse la vida y lo que cuesta". "Nosotros no tenemos poderosos al lado ayudando, sólo tenemos a la gente, al pueblo", remachó.

Incidió además en la igualdad de todo el mundo en democracia y en la igualdad de oportunidades. "La derecha tiene alergia a la libertad, a la solidaridad, por qué se opone a leyes que han extendido derechos. Siempre han querido un país de derechos para unos pocos, y nosotros queremos derechos para todos tengan el nivel de renta que tengan", dijo.

Y recordó también al ex presidente del Gobierno Felipe González, que presidirá un grupo de expertos de la UE sobre el futuro de Europa, y emplazó a la derecha a "que aprenda, que reconozca la valía y el mérito de Felipe González". "Todos celebramos esa etapa de progreso y modernización", añadió cuando alguien en el público le recordó que la derecha llamó a González "pedigüeño".

DEFIENDE EDUCACION PARA LA CIUDADANIA

El jefe del Ejecutivo defendió también la asignatura de Educación para la Ciudadanía, que pretende que "desde muy joven se sepa qué es la libertad, qué es la tolerancia, que son los Derechos Humanos, qué es la ONU, que es la legalidad internacional que es la convivencia".

El PP, añadió, hace "lo contrario, que es insultar, descalificar, mentir, olvidar lo que han dicho los ciudadanos en las urnas, aceptarlo a regañadientes", dijo, mientras alguien gritaba "en eso tienen sobresaliente". Y añadió "por eso quiero que España sea un país con Educación para la Ciudadanía".

Pese a pedírselo, el público se quedó sin referencias a la 'niña de Rajoy' y a la Iglesia, aunque Zapatero insistió en que en España "nadie puede imponer sus creencias ni sus doctrinas".

Terminó refiriéndose a la candidata número tres por Ciudad Real, que podría convertirse en la diputada más joven del Congreso, "Yo fui dos legislaturas el diputado más joven y mira lo que tengo que hacer ahora", le dijo. Y se despidió como en los debates televisados. "A votar y a ganar, buenas noches y buena suerte".