Garantiza que aceptará el resultado "con una sonrisa" y que, si pierde, reflexionará y quedará a disposición de su partido
MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a la reelección, José Luis Rodríguez Zapatero, considera que las elecciones generales del próximo 9 de marzo se presentan "muy competidas" y cree que habrá una tensión "lógica" en la campaña que arranca esta noche, pero en cualquier caso espera que se mantenga el "respeto" y que no haya "crispación".
En una entrevista en Telecinco, Zapatero indicó con sorna que la rueda de prensa conjunta del seleccionador Luis Aragonés y el futbolista Raúl es un "éxito del diálogo y del talante". Trasladando este episodio futbolístico a la política, agregó que "se puede conseguir una convivencia amable incluso en la disputa", también entre él mismo y el líder del PP.
A su juicio, en las elecciones del 9 de marzo "nada está decidido" hasta que voten los ciudadanos y lo único que tiene claro es que "serán unas elecciones competidas". En ese contexto, espera que, con la tensión "lógica" en estos casos, la campaña mantenga un tono de respeto y tolerancia, sin crispación.
CRISPAR ES CULPAR AL GOBIERNO DE LOS VÁNDALOS.
Crispación, según dijo en otro momento, como la que en su opinión promueve Mariano Rajoy cuando culpa al presidente del Gobierno de los abucheos y boicots provocados en distintas universidades españolas contra las 'populares' María San Gil y Dolors Nadal o la ex socialista Rosa Díez.
"La capacidad de exagerar y descalificar de los dirigentes del PP no tiene límites --se quejó--. Responsabilizar a nadie de lo que hagan esos vándalos es inaceptable. Es un buen ejemplo de quién busca la crispación: quien imputa al presidente del Gobierno que su política alimenta esas actitudes que detestamos".
Respecto al día siguiente de las elecciones, Zapatero dejó claro que en el escenario no hay opción a una gran coalición como la llevada a cabo en Alemania entre socialdemócratas y democristianos, pues cree que hay más partidos y que quien gane los comicios buscará en ellos sus apoyos. "No forma parte de nuestra tradición y no veo expectativa de gran coalición", zanjó.
Preguntado qué hará si es derrotado el 9 de marzo, se limitó a decir que estará "a disposición" de lo que le diga su partido y que reflexionará "tranquilamente". "En democracia hay que estar preparado para cualquier eventualidad. Una regla esencial es la aceptabilidad de la derrota, pero también con una sonrisa se puede", concluyó.
