Zaplana recuerda que Zapatero derogó el castigo penal, de 3 a 5 años de cárcel, para consultas como la de Ibarretxe

Actualizado: viernes, 28 septiembre 2007 19:56

Critica que De la Vega "ni siquiera" ha querido subrayar la "obviedad" de que un referendum sobre autodeterminación es "ilegal"

MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Eduardo Zaplana, recordó hoy, en declaraciones a Europa Press, que el Gobierno de Zapatero derogó el castigo penal, que incluía penas de 2 3 a 5 años de cárcel, para consultas como la que ha anunciado hoy el lehendakari. Además, criticó a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, de quien asegura que "ni siquiera" ha querido subrayar la "obviedad" de que un referéndum de autodeterminación es "ilegal". La conclusión de Zaplana es que los españoles deben pronunciarse "cuanto antes" para que los "daños no sean irreparables".

Para Zaplana "es normal que la vicepresidenta no haya sabido contestar al reto que ha lanzado Ibarretxe" y se preguntó "¿qué otra cosa podía hacer, qué otra cosa podía anunciar, si el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero es el responsable de la modificación del Código Penal por la que se derogaron tres artículos que castigaban con penas de tres a cinco años de prisión e inhabilitación a quienes convocaran procesos electorales o consultas populares por vía de referéndum, careciendo de competencias para ello?".

REGALO DE ZAPATERO A IBARRETXE

En opinión del dirigente popular "ese fue el regalo de Zapatero a Ibarretxe tras su reunión en octubre del 2004". Por eso, considera que el Gobierno y la vicepresidenta "han perdido el crédito para criticar a Ibarretxe", algo que, apuntó, "ni siquiera ha intentado cuando, en la rueda de prensa que ha dado hoy, la número dos del Ejecutivo ni siquiera ha querido subrayar lo que es toda una obviedad: que la convocatoria de un referéndum o consulta sobre la autodeterminación es totalmente ilegal".

En este sentido, Zaplana recalcó que no hay que esperar a que se concreten las "circunstancias jurídicas, como ha declarado la vicepresidenta en una irresponsable actitud de echar balones fuera". "Es, sencillamente, ilegal", apostilló.

El dirigente popular considera que el Ejecutivo se han quedado "sin argumentos después de que en las últimas semanas hayan hecho gala de un relativismo legal aberrante -que hoy han culminado- cuando no han hecho nada, por ejemplo, ante los ataques a los símbolos nacionales, cuyo uso está regulado por el ordenamiento jurídico vigente".

Se mostró preocupado por la "espiral" que ha tomado la situación ya advirtió que, de aquí a marzo, "puede provocar daños mayores en nuestro sistema de convivencia". Además, estima que el problema del Gobierno es aún mayor porque, afirma, "antes de reconocer que ha cometido un error o que nosotros estábamos en lo cierto, cabe que siga sumándose y alentando las tesis rupturistas de los que les dan su apoyo".

GROSEROS CALIFICATIVOS PARA INSULTAR AL PP

Por este motivo, cree que la única reacción que ha tenido hoy ha sido la de "insultar al Partido Popular utilizando los más groseros calificativos que se le han ocurrido". "Que la vicepresidenta nos insulte es habitual", exclamó Zaplana, quien recordó que De la Vega les insulta "con frecuencia".

No obstante, destacó que en esta ocasión lo ha hecho utilizando la mesa del Consejo de Ministros. Esto, dijo, "pone de manifiesto la necesidad de que los españoles se pronuncien cuanto antes, como cada día exige más gente antes de que los daños sean irreparables". Apunta, en este sentido que, el otro día "parecía que lo hacía hasta el propio Felipe González".

En opinión del dirigente popular, el Gobierno "está recogiendo las tempestades de los vientos que ha ido sembrando a lo largo de la legislatura". "Mejor dicho --prosiguió--: somos los españoles, todos los españoles, quienes recogemos las tempestades de los vientos que ha sembrado el Gobierno".

Eduardo Zaplana considera que los españoles tienen un "inmenso problema del que el Ejecutivo, con su errática política territorial y con su estrategia de alentar los nacionalismos radicales, es responsable".