PAMPLONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Barañáin, Iosu Senosiáin (PSN), discrepó hoy de las declaraciones del presidente del Gobierno foral en el sentido de que el ataque registrado contra la ferretería de un concejal de Barañáin fue un "atentado terrorista" y pidió a Miguel Sanz "prudencia" en sus declaraciones.
Iosu Senosiáin pidió que se espere a la investigación de la Guardia Civil para determinar si los ataques en Barañáin y Getxo fueron ordenados por ETA y subrayó que "hay que ayudar al proceso de paz y no echar más leña al fuego".
El alcalde socialista dijo "agradecer" que Barañaingo Irrintzia, candidatura ilegalizada por ser considerada heredera de Batasuna, se haya solidarizado con los vecinos afectados por el ataque y vaya a estar presente en la concentración en repulsa por este suceso esta tarde en Barañáin.
El primer edil de la localidad hizo estas declaraciones ante los medios junto a la ferretería que fue atacada el sábado, después de que Miguel Sanz pidiera a José Luis Rodríguez Zapatero que "interrumpa" el proceso de paz tras los dos ataques del fin de semana.
Iosu Senosiáin destacó respecto al incendio provocado en Barañáin que "ha habido una buena coordinación entre las administraciones", lo que ha permitido la apertura de una oficina de coordinación en la Policía Municipal de Barañáin, que ya ha sido visitada por la mayoría de los vecinos para reclamar ayudas económicas a los seguros.
El alcalde socialista destacó que "finalmente se ha quedado todo en solucionar problemas materiales, porque los heridos iniciales ya fueron dados de alta a las buenas horas". "Hay que agradecer a la Policía Foral, a la Policía Municipal y a la Guardia Civil su coordinación en la evacuación. En general podemos estar contentos de que lo que había sido una tragedia se ha quedado solamente en daños materiales", añadió.
Uno de los vecinos que tuvo que ser desalojado por el ataque del sábado, Lorenzo Aceituno, residente en el tercer piso, declaró hoy a los medios de comunicación que por el momento "la Administración, tanto el Gobierno como el Ayuntamiento, se está portando bien, pero ya veremos qué pasa los próximos días".
El vecino explicó que en una conversación que mantuvo esta mañana con otros afectados todos coincidían en que "todavía veían las llamas subiendo por las ventanas". "Gracias a Dios no hubo viento, y por eso no pasaron las llamas dentro de las casas. Se veía una lengua de fuego, pero nada más", apuntó.
