PAMPLONA, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La asociación de consumidores Irache advirtió de que "alargar el plazo de amortización por encima de 30 años no ofrece una rebaja importante de la cuota mensual, y sí en cambio un aumento significativo de los intereses a pagar por el préstamo".
Según explicó esta asociación mediante un comunicado, "la reducción en la cuota mensual todavía es menor si se pactan hipotecas a más de 40 años". En este sentido, Irache explicó que "hasta hace pocos años, era extraordinario hablar de hipotecas a más de 30 o 40 años, pero la subida del precio de la vivienda ha convertido a las hipotecas de 35, 40 o incluso 50 años en el último recurso para muchas personas que quieren acceder a su primera vivienda".
"Contratar una hipoteca a 35 o 40 años supone comprometer a priori toda la vida laboral del solicitante, si éste es joven", remarcó la asociación de consumidores, que también destacó que "en las hipotecas concertadas a 50 años, el plazo de amortización se extiende hasta la jubilación".
Pero, según expuso Irache, "la rentabilidad de las hipotecas a más de 30 años es muy discutible porque la rebaja en la cuota mensual con relación a las hipotecas de 20, 25 o 30 años no es significativa y en cambio sí lo es el aumento de los intereses a pagar por el préstamo".
Para explicarlo, ponen un ejemplo: "partiendo del importe medio de las hipotecas de vivienda en Navarra (148.538 euros) y fijando como tipo de interés el 5,10 por ciento, se puede observar como alargar el plazo de amortización de la hipoteca de 30 a 40 años supone una rebaja en la cuota mensual de 80,38 euros. Sin embargo, los intereses que pagaremos aumentarán en 58.200 euros".
"Las ventajas son aún menores si el plazo de devolución del préstamo pasa de 40 a 50 años. En este caso, la cuota mensual se reduce sólo en 41 euros, pero los intereses que pagaremos aumentarán en 62.500 euros", explican.
No obstante, Irache también remarca que "estos datos también demuestran que alargar el préstamo hipotecario en algunos casos sí puede resultar útil al consumidor, en función de las circunstancias económicas en que se encuentre. Así, puede resultar interesante alargar el plazo de 20 a 30 años, por ejemplo, porque aunque pagaremos más intereses (aproximadamente 53.000 euros más), la rebaja en la cuota mensual será mucho más importante: 182 euros".
En cualquier caso, dicen que "ante la subida de tipos de interés que se ha venido produciendo, así como el incremento del precio de productos básicos para los consumidores" insisten en "la necesidad de que los consumidores traten de no comprometer más del 35 por ciento de sus ingresos en el pago de un préstamo hipotecario".
