PAMPLONA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona ha decretado este sábado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza de tres supuestos integrantes de una banda que ha perpetrado diversos robos en viviendas en Navarra. El auto puede ser recurrido.
El magistrado expone que existen "indicios racionales" de que los imputados han participado en la comisión de varios delitos de robo con fuerza en casa habitada, castigados con penas de 2 a 5 años de prisión, así como de un delito de pertenencia a organización o, en su caso, grupo criminal organizado, penado con hasta 3 años de prisión, según ha informado en una nota el Tribunal Superior de Justicia de Navarra.
Estos indicios vienen constituidos, por un lado, por el hecho de haber sido sorprendidos prácticamente 'in fraganti' en el último de los robos, cuando ya abandonaban la vivienda donde habían entrado. En ese momento, fueron detenidos por los agentes que llevaban días siguiéndoles.
Las vigilancias y seguimientos efectuados por la policía permiten apreciar indicios de que los tres imputados, de forma concertada, se repartían las tareas para llevar a cabo los robos.
Según describe el juez, los encausados vivían juntos para organizar mejor sus actividades delictivas, escondían los útiles para perpetrar los robos en lugares estratégicos a fin de minimizar el riesgo de verse sorprendidos y adoptaban todo tipo de medidas de seguridad para evitar seguimientos y vigilancias policiales, "lo que revela la profesionalidad de estos individuos".
También constan en la causa reconocimientos de ciudadanos que han sorprendido a los imputados a punto de cometer hechos delictivos, "lo que igualmente da idea de su dedicación reiterada" en la comisión de delitos de esta naturaleza, "que evidentemente generan un grave riesgo para las personas y una gran alarma social".
Para el juez, la adopción de la prisión provisional "se evidencia como absolutamente imprescindible a fin de asegurar la presencia de los imputados en el proceso y evitar el riesgo de que cometan otros hechos delictivos análogos".
Los encarcelados son extranjeros, sin ningún tipo de arraigo en España, y se encuentran en situación irregular. Además, varios han usado identidades distintas, comportamiento que, agrega el magistrado, solo adopta quien trata de evitar la acción policial y judicial. Por todo ello, se hace necesario acordar la medida de prisión porque, asegura que el juez, es más que presumible que, en caso de quedar en libertad, volverían a delinquir.
