La juez procesa a cinco personas por el asesinato de Yamiled Giraldo el pasado mes de abril en Cordovilla

Actualizado: sábado, 12 septiembre 2009 13:34

Los dos supuestos autores del crimen cobraron 8.000 euros por asesinar a la mujer y también pretendían matar al hijo de ésta

PAMPLONA, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -

La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona ha procesado a cinco de los imputados por el asesinato el pasado 25 de abril de Yamiled Giraldo Quintero en Cordovilla. En las resoluciones judiciales, la magistrada expone que los supuestos autores materiales del crimen, R. S. S. y N. A. M., recibieron a cambio de perpetrar el asesinato 8.000 euros, y revela además que, tras disparar contra Yamiled Giraldo, R. S. S. también intentó matar al hijo de ésta que le acompañaba pero no pudo hacerlo porque el arma se encasquilló.

En resumen, la juez relata en los autos de procesamiento que R. S. S., cuando estaba recluido en la prisión de Pamplona, recibió de K. I. M. también preso, la proposición de matar a una mujer, que resultó ser Yamiled Giraldo, una propuesta que fue reiterada una vez el primero salió en libertad, informó hoy el Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

Tras aceptar la oferta, N. A. M. se encargó de localizar a la mujer con los datos que desde prisión le eran proporcionados, para lo que realizó varios viajes a la localidad de Ituren, donde la víctima residía. Este encargo tenía su origen en J. L. L., que en su día había sido denunciado por esta mujer y otras, y que fue condenado por varios delitos contra la libertad sexual.

Para realizar los seguimientos y vigilancias, así como para adquirir el arma y el vehículo que se iban a utilizar en la realización de los hechos recibieron una cantidad inicial de 4.000 euros. Al ver que el tiempo pasaba y no se cumplía el encargo, J. L. L. empezó a urgir su inmediata realización a través de K. I. M. y J. A. G. P., también recluido en la cárcel de Pamplona, y que eran quienes actuaban como intermediarios con los encargados de llevar a cabo la ejecución material del hecho.

Por este motivo N. A. M. y R. S. S. decidieron concertar una cita con Yamiled Giraldo, para lo cual N. A. M. llamó a ésta por teléfono. Alegó que tenía una boda el 25 de abril y que su esteticista habitual le había fallado. Le indicó que este servicio debía realizarse a domicilio y que estaba dispuesta a abonar por el mismo la cantidad que fuera precisa.

Yamiled Giraldo, a pesar de ser esteticista profesional, no realizaba habitualmente este tipo de servicios a domicilio, por lo que optó por pensarse el trabajo o incluso encargarlo a una compañera, si bien finalmente se decidió a llevarlo a cabo personalmente. Por este motivo, llamó a su interlocutora y le comunicó que aceptaba. N. A. M., que se identificaba como Alicia, le indicó la dirección a la que tenía que acudir, calle Fuente Vieja 6 de Cordovilla.

Como Yamiled Giraldo no conocía el lugar, acordó con la mujer que le llamaría al llegar a la zona, un paraje que había sido elegido expresamente para la cita porque consideraron que se trataba de un lugar solitario, sin afluencia de gente.

DÍA DEL CRIMEN

El 25 de abril de 2009, Yamiled se dirigió a Cordovilla junto a uno de sus hijos sobre las 7.45 horas en su vehículo y contactó con Alicia (N. A. M.) para decirle que ya iba al domicilio y que como no sabía llegar le volvería a llamar. A las 8.20 Yamiled Giraldo llegó a la urbanización de Cordovilla y, tras estacionar el vehículo, telefoneó nuevamente a Alicia, diciéndole ésta que tenía que seguir recto y girar a la izquierda.

Al llegar a la dirección exacta estacionaron el vehículo y Yamiled y su hijo comenzaron a descargar el material de trabajo. En ese momento llegó al lugar un coche pequeño de color blanco, ocupado por dos personas ataviadas de forma que ocultaban su rostro; una de ellas conducía el turismo y la otra ocupaba uno de los asientos traseros. Estacionaron en la rampa de acceso a la urbanización, y R. S. S. bajó del vehículo portando un arma de fuego con la que efectuó varios disparos contra Yamiled Giraldo, que cayó al suelo.

Seguidamente, se dirigió también hacia el menor, le apuntó y en el momento en que intentó disparar contra él no pudo hacerlo porque el arma se encasquilló. Se giró, cambió el cargador y nuevamente disparó sobre Yamiled Giraldo, tras lo cual se montó en el vehículo y abandonó la zona.

El vehículo utilizado fue identificado como un Peugeot 306 XR de color blanco. Una vez cometidos los hechos, abandonaron este coche, montaron en el de N. A. M. y fueron hacia la UNED. Al llegar al puente que pasa sobre el río Sadar, R. S. S. se bajó del turismo y arrojó al río la pistola utilizada, que posteriormente fue encontrada por efectivos policiales. De igual forma, el vehículo usado fue igualmente hallado por los agentes en el lugar donde había quedado estacionado.

Después de perpetrar el crimen, N. A. M. y R. S. S. pusieron los hechos en conocimiento de los implicados, que se encontraban recluidos en el centro penitenciario, y días más tarde recibieron el dinero restante por llevarlos a cabo, que ascendía a otros 4.000 euros. En los autos dictados el pasado 1 de septiembre, la magistrada procesa a R. S. S. y N. A. M. por cuatro delitos: obstrucción a la Justicia, asesinato _con las circunstancias de alevosía y precio, recompensa o promesa y con la agravante de actuar mediante disfraz y aprovechando las circunstancias del lugar_, asesinato en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas.

A los otros tres procesados, K. I. M., P. A. G. P. y J. L. L., les imputa los delitos de obstrucción a la Justicia y asesinato, con las circunstancias de alevosía y precio, recompensa o promesa.

Una vez dictados los autos de procesamiento, la juez instructora practicó ayer las declaraciones indagatorias de los imputados, dos en el Juzgado de Guardia de Pamplona y las otras tres mediante videoconferencias con las respectivas prisiones en las que se encuentran los implicados. La magistrada, que mantiene la prisión provisional comunicada y sin fianza de los procesados, ha cifrado por el momento la responsabilidad civil en 640.000 euros.