El 75,6 por ciento de las disoluciones fueron de mutuo acuerdo
PAMPLONA, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
Navarra registró en el año 2010 1.250 disoluciones matrimoniales, un 7,4 por ciento más que en 2009. De esta manera, se rompe la tendencia descendente de las rupturas matrimoniales iniciadas en 2007.
Por tipo de ruptura, en 2010 se produjeron 1.170 divorcios, un 8,9 por ciento más que en 2009, y 74 separaciones, un 7,5 por ciento menos que el año anterior, según los datos del Instituto de Estadística de Navarra.
El divorcio, como en años anteriores, sigue siendo la forma de ruptura más utilizada, ya que el 93,6 por ciento de las disoluciones son divorcios; en segundo lugar, la separación (5,9%); mientras que las nulidades matrimoniales siguen teniendo una presencia residual (0,5%).
El predominio del divorcio frente a otras formas de disolución se explica por la modificación legislativa de 20051 que permite la disolución por divorcio sin pasar por la separación. De las 1.250 rupturas, 1.244 fueron de parejas de diferente sexo y 6 de parejas del mismo sexo.
El 75,6 por ciento de las disoluciones matrimoniales en 2010 fueron de mutuo acuerdo. Del total de divorcios, el 75,1 por ciento fueron consensuados y el 24,9 por ciento restante no consensuados. En el caso de las separaciones, el 83,8 por ciento fueron de mutuo acuerdo y el 16,2 por ciento, contenciosas.
En relación con la edad de las parejas, el mayor número de rupturas tuvo lugar, tanto en hombres como en mujeres, entre los 40 y 49 años, registrándose el 38,2 por ciento y el 32,6 por ciento de las disoluciones respectivamente. En ambos sexos y en menor porcentaje, un 20,7 por ciento, le siguen las disoluciones entre los 35 y 39 años.
La edad media de las mujeres en el momento de la disolución matrimonial fue de 44,3 años (40,8 años en los divorcios y 48,2 en las separaciones). En el caso de los hombres, la edad media fue de 47 años (43,6 años en los divorcios y 48,7 en las separaciones). Dichas edades medias fueron ligeramente superiores a las registradas en 2009 (42,8 para las mujeres y 44,5 años para los hombres).
En cuanto a la nacionalidad de los cónyuges, el 81,1 por ciento de las rupturas en 2010 tuvo lugar entre cónyuges de nacionalidad española, mientras que en el 10,9 por ciento de las mismas uno de los cónyuges era extranjero, y en el 8 por ciento de los casos ambos cónyuges eran extranjeros, similares porcentajes que en 2009.
DURACIÓN MEDIA
La duración media de los matrimonios disueltos fue de 11,7 años, valor similar al de años anteriores. Los matrimonios disueltos por divorcios tuvieron una duración media de 11,6 años mientras que en el caso de las separaciones los años de unión se elevan a 14,9 años.
En el análisis de la distribución porcentual se observa que, en el caso de los divorcios, el 24,3 por ciento de los matrimonios llevaban casados 20 o más años, y el 19,9 por ciento de los matrimonios tuvo una duración de entre 6 y 10 años, cifra que disminuye en 4,3 puntos porcentuales con respecto al año anterior.
En el caso de las separaciones, el 45,9 por ciento se produjo después de 20 años de matrimonio y el 21,6 por ciento en uniones que duraron entre 6 y 10 años. En comparación con 2009, en 2010 disminuyen 13,6 puntos porcentuales las separaciones de uniones largas (20 años o más) y aumentan en 8,9 puntos porcentuales los matrimonios que duraron entre 6 y 10 años.
Atendiendo al estado civil de los cónyuges cuando contrajeron el matrimonio que se disuelve, la mayoría eran solteros. En el caso de los varones, el 7,6 por ciento eran divorciados y el 0,5 por ciento, viudos. Entre las mujeres, el 6,8 por ciento eran divorciadas y el 0,3 por ciento, viudas.
El 54 por ciento de los matrimonios disueltos en 2010 tiene hijos menores de edad, cifra similar a la de 2009 (51,5%). De las parejas con hijos menores, el 49 por ciento tienen un hijo y el 43,6 por ciento, dos hijos. En el 73,5 por ciento de los casos la custodia recae en la madre, en el 19,6 por ciento es compartida y en el 5,7 por ciento la tiene el padre.
