PAMPLONA, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Policía Foral y la Guardia Civil de Navarra han realizado más de 355 controles de tráfico en el marco del Plan Ribera 2012, una campaña preventiva de seguridad vial impulsada por ambos cuerpos policiales ante el incremento de fallecidos en accidentes de tráfico en las vías del sur de la Comunidad foral.
Dentro de la campaña, que ha tenido lugar desde el lunes 8 de octubre hasta el 18 de noviembre, se han realizado más de 355 controles, de los cuales 117 han sido de documentación, 141 de velocidad y 106 de verificación de alcohol.
En su conjunto, según ha informado el Gobierno navarro en un comunicado, han sido controlados 22.407 vehículos (575 documentación, 20.124 radar y 708 pruebas de alcohol) y se han formulado más de 1.300 denuncias, incidiendo principalmente en la velocidad, el uso de móviles, distracciones en la conducción y alcoholemia.
En concreto, la campaña ha intensificado la vigilancia de la NA-134, AP-68, NA-160, NA-115, N-113, y N-121, así como aquellas carreteras de cierta relevancia que cruzan o parten de las vías anteriormente citadas. Esta decisión procedía de un estudio previo en el que se ponía de manifiesto los tramos viales en los que se había producido mayor número de accidentes con víctimas, del que se concluyó, asimismo, que en las principales infracciones que provocaron siniestros hubo circunstancias de velocidad inadecuada, distracciones o falta de atención en la conducción.
Fruto de estos resultados, se ha decidió intensificar notablemente los controles de velocidad, en especial aquellos enfocados a detectar y denunciar conductas que distraen la atención de los conductores, como el uso del teléfono móvil o de navegadores.
La Policía Foral y la Guardia Civil recomiendan, al respecto, circular por debajo del límite de velocidad y adaptarse a las circunstancias de la vía o climatológicas; no tomar bebidas alcohólicas si se tiene que conducir y adoptar las precauciones correspondientes si se está consumiendo medicamentos; y hacer uso del casco, del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil.
Asimismo, instan a mantener especial alerta en la conducción cuando se haga en calidad de ciclista o motorista, dado que su propio cuerpo se convierte en el chasis del vehículo. También aconsejan tener cuidado en las incorporaciones a otras vías, incluso cuando se tenga preferencia y, especialmente, en los adelantamientos.
Se recomienda, finalmente, encender las luces al circular, según indican las normas de tráfico, manteniéndolas encendidas en caso de duda; hacerse ver utilizando chalecos, triángulos y dispositivos reflectantes y comportarse, como peatón, con la misma responsabilidad que si se fuera conductor.
