El PPN dice que "no se puede renunciar" a un acuerdo entre partidos del centro-derecha para gobernar Navarra en 2011

Actualizado: jueves, 11 febrero 2010 14:44

PAMPLONA, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Partido Popular de Navarra afirmó hoy que "no se puede renunciar de ningún modo a que en Navarra no pueda reeditarse un pacto entre partidos políticos del ámbito del centro y del centro derecha navarro, parecido al que tuvo lugar en la legislatura de 2003 a 2007 entre UPN-CDN y que disponía de mayoría parlamentaria".

Así, el PPN advirtió a la presidenta de UPN, Yolanda Barcina, de que "la fórmula de gobierno entre UPN y PSN no es la única posible para que en Navarra se consiga que no gobierne el nacionalismo vasco" y reivindicó que "existen otras soluciones distintas y que esas otras fórmulas pasan por el Partido Popular de Navarra, que va a ser una fuerza parlamentaria determinante a partir de 2011".

El PPN se pronunció así en un comunicado después de que Barcina señalara el martes que si la actual forma de gobierno estaba siendo "buena" en este momento, "en 2011 también será buena".

Tras las declaraciones de Barcina, el Partido Popular lamentó que la presidenta de UPN "vea de forma irremediable, imprescindible y obligatoria que el PSN sea el único socio posible de UPN para garantizar la llamada gobernabilidad de la Comunidad foral, no sólo en estos momentos, sino también a partir de las próximas elecciones forales de 2011". "Constatamos, además, que es el propio PSN quien directamente quiere buscar fórmulas distintas de gobierno", dijo.

El PPN señaló que "los acuerdos sólo nacen de la voluntad de todas las partes, y no de la mera voluntad de una sola de ellas, y en este caso parece clara la opción que UPN ya ha adoptado".

Por último, los 'populares' aseguraron que trabajarán "de forma responsable con el objetivo de que no gobierne el nacionalismo vasco en Navarra, pero sin renunciar a que a la vez se pueda conseguir gobernar mejor, de una manera más eficaz y con el cuidado escrupuloso de los recursos públicos que los navarros confían a sus gobernantes".