Puestos de artesanía, de gastronomía y talleres en el mercado medieval del Casco Antiguo de Pamplona

Actualizado: sábado, 6 septiembre 2008 12:54

PAMPLONA, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -

La zona de confluencia de los tres antiguos burgos de la ciudad (Navarrería, San Cernin y San Nicolás) se convirtieron desde ayer en un mercado medieval. La calle Mercaderes, la Plaza Consistorial, la calle Nueva, la Plazuela del Consejo, la calle Zapatería y la plaza de San Nicolás acogen este fin de semana puestos, talleres y muestras de oficios ambientados en la Edad Media, con motivo del 585 aniversario del Privilegio de la Unión, que se celebra el lunes 8 de septiembre.

El Mercado se instalará en el Casco Antiguo de la ciudad los días 5, 6 y 7 de septiembre. Los días 6 y 7 el mercado se abrirá de 10.30 a 14 y de 17 a 21 horas. Un total de 52 puestos ofrecerán una amplia variedad artesanal, de carácter tanto artístico como alimentario, según informaron desde el Consistorio en un comunicado.

El sector de la alimentación artesana contará con la venta de chocolates, embutidos, vinos, quesos, pastas, barquillos y mermeladas, toda una variedad de productos de alta calidad elaborados de manera artesana. Cada puesto contará también con una exposición de elementos etnográficos relativos al producto que vende.

Además de la gastronomía, quien se acerque por el Mercado Medieval podrá adquirir cerámica, jabones, juguetes de madera, perfumes, platería, pendientes, ropa y zapatos, entre otras muchas especialidades con claro sabor medieval. Como novedad, este año se amplía el recorrido a la Plaza de San Nicolás con una demostración de producción y tratamiento de la lana. Al igual que el pasado año, se instalará en la Plazuela del Consejo la taberna medieval.

En este particular mercado, los asistentes podrán conocer los oficios de la Pamplona medieval. Una muestra de viejos oficios y sus artesanos trabajarán los materiales de cara al público. Así, se conocerá el trabajo de talla de madera, la forja o la realización de flores secas.

También se montará un taller de alfarería donde los niños amasarán el barro y elaborarán su propia pieza de cerámica, que podrán llevarse a casa. Con los talleres, tanto participativos como demostrativos, se pretende que los pequeños disfruten y los mayores revivan y recuerden tiempos no muy lejanos en los que se realizaban estos trabajos.