PAMPLONA, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, pidió hoy "prudencia" ante los hechos ocurridos el pasado domingo en Leitza en los que un guardia civil resultó herido de bala en un brazo, al considerar que "podríamos estar asistiendo a un proceso también relacionado con una víctima del terrorismo".
El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona comunicó ayer al guardia civil herido este domingo en Leitza su imputación por sendos delitos de simulación de delito y desórdenes públicos, ya que, en un primer momento y según la propia declaración del afectado el día de los hechos, sus heridas habían sido provocadas por uno o varios individuos armados, presuntamente miembros de ETA.
En declaraciones a los medios de comunicación tras el acto de entrega de los Galardones de la Juventud 2009, el jefe del Ejecutivo foral aseguró que "hay que actuar con mucha prudencia en situaciones de esta naturaleza", ya que, "están inmersos en un proceso de investigación que debe llevar a cabo precisamente la Guardia Civil y los jueces".
Según Sanz, "no conviene precipitarse" sobre lo ocurrido el domingo en Leitza porque "podríamos estar asistiendo a un proceso también relacionado con una víctima del terrorismo". En su opinión, el guardia civil que resultó herido de bala podría haber actuado "bajo una presión psicológica derivada de haber sido testigo directo y presencial de un atentado que acabó con la vida de su compañero, Juan Carlos Beiro".
Así, el presidente del Gobierno navarro defendió que el guardia civil herido el domingo "podría haber actuado bajo un síndrome que en estos momentos desconocemos" y destacó que "la prudencia es la mejor consejera en estos momentos".
