Tasubinsa vende su división de lavandería y cancela la deuda pendiente con el Gobierno de Navarra

Lavandería de Tasubinsa.
TASUBINSA
Actualizado: lunes, 23 julio 2018 14:15

PAMPLONA, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

Tasubinsa ha vendido su negocio de lavandería, Tasuclean, al Grupo ILUNION Lavanderías, con el fin de "saldar la deuda pendiente con el Gobierno de Navarra".

Según ha informado Tasubinsa en una nota, "el cambio de propiedad de este negocio no modifica la situación de los trabajadores de la lavandería, ni tampoco el servicio a sus clientes, ya que la dirección de Tasuclean estaba siendo gestionada por ILUNION desde febrero de 2015".

Javier Goldáraz, presidente de Tasubinsa, ha afirmado que "ILUNION es propietario del 22% de Tasubinsa y el Grupo ILUNION Lavanderías es líder nacional en este sector, teniendo como objetivo la integración laboral de las personas con discapacidad, y además se trata de un centro especial de empleo de iniciativa social sin ánimo de lucro, por lo que la propiedad de Tasubinsa hemos entendido que es la mejor manera que tenemos para garantizar el empleo y la calidad del servicio a nuestros clientes, así como para terminar de saldar la deuda con el Gobierno".

La lavandería industrial da trabajo a 42 personas, un 90% de ellas con algún tipo de discapacidad. Se sitúa en el polígono Mocholí de Noáin y cuenta con lavadoras de 200, 50 y 25 kilos y un túnel de lavado de 13 módulos diferenciados. Tasuclean, en UTE con la empresa Indusal, gestiona la limpieza de las prendas sanitarias del servicio completo del Servicio Navarro de Salud, entre otros trabajos. Sus clientes principales son el sector sanitario e industrial de Navarra. "Estos servicios se van a mantener en idénticas condiciones como hasta la fecha", ha añadido.

Gracias a esta venta, Tasubinsa termina de cancelar un año antes del vencimiento de su último plazo la deuda con Gobierno de Navarra, creada en 2014 por los reintegros de los expedientes de subvención relativos a los años de 2010 a 2013, y que ascendía a un total de 2,9 millones de euros. La entidad sin ánimo de lucro navarra había pagado 1,2 millones de euros y quedaba pendiente de reintegrar 1,7 millones, más intereses, antes de agosto de 2019.